El médico brasileño que reapareció en el Hula retoma su peregrinación

El lunes se había denunciado su desaparición. Se encontraba en Lugo, recibiendo cuidados tras la deshidratación que sufrió haciendo el Camino
El médico brasileño Leonardo José Nissola, de 40 años, posa delante de la Iglesia parroquial de Melide. ELISEO TRIGO (EFE)
photo_camera El médico brasileño Leonardo José Nissola, de 40 años, posa delante de la Iglesia parroquial de Melide. ELISEO TRIGO (EFE)

El médico brasileño Leonardo José Nissola, de 40 años, cuya desaparición fue denunciada el lunes al no tener noticias de su paradero y que el miércoles fue localizado en el hospital Lucus Augusti, retomó este viernes su aventura y se calzó las botas para ponerse a andar nuevamente. "Esta es una experiencia increíble", certifica.

Con estas palabras califica su hazaña a través de una ruta histórica de la que solo cuenta bondades, pese al infortunio sufrido a causa de una severa deshidratación que, paradojas de la vida, acabó con el galeno en un centro médico donde, manifiesta, fue tratado con profesionalidad y amor.

Este doctor, miembro de la academia estadounidense de inmunólogos y residente en California, conocía Barcelona y Madrid pero no el norte de España, y con su descubrimiento se confiesa "fascinado". Parte de esta jornada la dedicó a Melide, donde visitó iglesias, conjuntos histórico-artísticos, descansó y gozó de la gastronomía.

Este científico arrancó su peripecia en Saint Jean Pied de Port el 25 de septiembre, después de su cumpleaños, que es el 9 de ese mes. Decidió dedicarse este tiempo de introspección tras escribir su segundo libro, centrado en fortalecer el sistema inmune con la verdad basada en la ciencia médica. Se adentró entonces en un itinerario tan duro como espectacular, según sus propias reflexiones.

En Galicia, cuando iba de Triacastela hasta Sarria, se le acabó el agua y no consiguió encontrar una fuente ni un lugar donde poder comprar una botella. "Entonces sentí calor, me noté agotado", rememora. Al final avistó un diminuto riachuelo donde apenas pudo refrescarse un momento. Cayó desmayado. "Cuando desperté, caminé solo hasta llegar al centro de salud sarriano. Allí resolvieron enviarme al Hula, un hospital muy bueno", explica.

Agradecimiento a los "increíbles trabajadores de la salud de España"

Tras una tomografía computadorizada cerebral, un electroencefalograma y varios chequeos neurológicos, la conclusión es que está de "lo más sano". Nada más dejar el Hula, este investigador explicó en Instagram a sus más de 15.000 seguidores la causa de su ingreso. Allí detalló que había recuperado su "fuerza" tras recibir líquidos y "mucho amor de los increíbles trabajadores de la salud de España".

"La alta calidad de la atención médica aquí viene con una ventaja: son amables, cálidos y cariñosos, una mercancía rara en estos días", agradeció.

Nissola, que confirma que ya está "físicamente bien", apunta que siente que está disfrutando de una "experiencia espiritual muy importante" para alguien como él, que trata a pacientes con cáncer y lidia a diario con la muerte.

Así, el Camino ha cambiado su visión sobre muchos aspectos de la existencia. Y espera seguir trabajando en ello. Ahora, confía en llegar al Obradoiro sin más sobresaltos y con avituallamiento suficiente.