Maltratar a su mujer 14 años y amenazarla con cuchillos le cuesta 21 meses de cárcel

Le decía delante de sus hijos: "Te lo voy a clavar y después te haré trocitos". El fiscal pedía 5 años, pero llegaron a un pacto
Edificio de los juzgados de Lugo, en la Praza de Avilés. SEBAS SENANDE
photo_camera Edificio de los juzgados de Lugo, en la Praza de Avilés. SEBAS SENANDE

Maltrató física y psicológicamente a su mujer durante 14 años –llegando a amenazarla en varias ocasiones con un cuchillo– y saldó su conducta con 21 meses de prisión y 130 días de trabajos en beneficio de la comunidad. El hombre reconoció este jueves los hechos ante el juez del Penal 2 de Lugo, que le impuso también la prohibición de aproximarse o comunicarse con su expareja durante doce años. Además, el magistrado le retiró la patria potestad de sus hijos, que también fueron víctimas de la violencia de su progenitor.

El fiscal pedía inicialmente cinco años de cárcel, pero acusaciones y defensa llegaron a un acuerdo para rebajar la pena. Además, mostraron su conformidad con que el hombre no tenga que entrar en prisión, siempre y cuando no vuelva a delinquir en tres años, respete el alejamiento, indemnice a las víctimas y haga un curso de educación para maltratadores.

La pareja inició su relación en 2006 y, ya desde el comienzo, el acusado mantuvo un comportamiento "controlador", llegando a llamar a su mujer hasta 30 veces seguidas para saber donde estaba. Además, la trataba de forma despectiva y la insultaba, un comportamiento que extendió a sus dos hijos. En una ocasión, en julio de 2014, le colocó a su pareja un cuchillo en el costado y le dijo: "Te lo voy a clavar y lo giraré para que entre aire en los pulmones y no te dé tiempo a pedir ayuda y te mueras. Después te haré trocitos".

Con posterioridad a estos hechos, la mujer decidió poner fin a la convivencia, pero el acusado empezó a chantajearla con que se quitaría la vida. Además, la víctima tenía una situación económica muy precaria y finalmente decidió retomar la convivencia con su ex, trasladándose ambos a Barcelona. Sin embargo, las cosas no cambiaron y el hombre siguió manteniendo un comportamiento agresivo hacia ella y hacia los niños, llegando a lanzar comida y a destrozar muebles de la casa.

En una ocasión, en junio de 2019, golpeó a la mujer en la cara y provocó que le sangrara la nariz, por lo que ella decidió separarse y se trasladó con sus hijos a Granada, mientras que el hombre fijó su residencia en la capital lucense. Una vez más, el acusado no le pasó la pensión de alimentos y la víctima volvió a retomar la convivencia con el acusado en Lugo. Las agresiones continuaron y el 9 de febrero de 2020, el hombre le puso a su pareja un cuchillo en el cuello y amenazó con matarla. Acto seguido, la tiró en el sofá y la golpeó, todo ello en presencia de los menores. Tras este episodio, ingresó en prisión provisional.

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