La revuelta feminista volvió a arrastrar en Lugo a miles de mujeres

La Policía Nacional calcula que la 'ruada' de este viernes congregó a unas 10.000 personas en la tercera manifestación que hubo en cinco días

La manifestación en Lugo. SEBAS SENANDE
photo_camera La manifestación en Lugo. SEBAS SENANDE

Las mujeres tienen fuerza en Lugo. Así quedó demostrado este viernes en la ruada, otra multitudinaria manifestación que, según la Policía Nacional, consiguió arrastrar a unas 10.000 personas clamando por los derechos de las mujeres y una sociedad más igualitaria.

Armadas con antorchas, tambores y pitos, las manifestantes —muchas de ellas, jóvenes— se abrían camino en la Praza de Santa María a un ritmo bastante rápido cuando la cola de la protesta todavía estaba en Santo Domingo.

A lo largo de toda la marcha, que parecía no acabar durante, al menos, diez minutos, se leían pancartas —la mayoría, de pequeño tamaño y elaboración casera— con proclamas feministas como por ejemplo: "No somos musas, somos artistas", "Ningunha muller nace para puta", "No soy perro, no me silbes", "No somos princesas, somos draconas", "Somos personas, no incubadoras", "No nos mires, únete" o "Tu machismo me hace voxmitar".

Las convocantes pidieron igualdad retributiva salarial y una enseñanza feminista que incluya la educación afectivo-sexual
 

Las personas que encabezaban la manifestación fueron entrando en la Praza de Santa María. Sin embargo, muchas otras se quedaron en la Praza Maior, pensando que no habría ya más hueco al lado de la catedral.

Allí, en la Praza de Santa María, los tambores no dejaban de sonar al igual que los cánticos hasta que llegó la hora de la lectura del manifiesto, que comenzó reconociendo el trabajo llevado a cabo por el movimiento feminista en las últimas semanas en Lugo —ante las multitudinarias manifestaciones de las dos de este viernes y la del domingo— y animando a todas las mujeres a "encender novos fachos que alumen esta noite enchendo de esperanza os corazóns".

La mujer que subió el escenario a leer el manifiesto hizo un llamamiento a la "revolta feminista, alto e forte" al tiempo que desgranaba las distintas reivindicaciones de esta convocatoria como, por ejemplo, que desaparezca el patriarcado, que se derogue la reforma laboral, que haya igualdad retributiva entre mujeres y hombres —"a fenda salarial en Galicia é do 30 por cento", dijo— y una enseñanza laica, pública, en igualdad y feminista que incluya la educación afectivo-sexual "pois a súa carencia está na raíz da violencia machista e sexual", afirmó la lectora del manifiesto.

"Somos persoas, non incubadoras", en contra de la gestación subrogada, fue una de las proclamas más aplaudidas en Santa María

También hubo una mención hacia las mujeres del rural, "que moitas delas non puideron parar hoxe", así como a las víctimas de la trata sexual del caso Carioca "que levan unha década agardando xustiza".

El manifiesto también pidió que las mujeres sean "protagonistas das nosas vidas e da nosa saúde", afirmando que no son "nin mercadorías, nin incubadoras", proclama que levantó muchos aplausos entre el público al grito de "somos persoas, non incubadoras".

Las manifestantes demandaron, además, "autonomía reproductiva" de forma que "o aborto sexa unha decisión libre".

El manifiesto terminó con una declaración de intenciones: la huelga feminista se convocó "non para parar o mundo, senón para transformalo", y con una proclama: "Por todas as mulleres e dereitos, revolta feminista!" al tiempo que el público comenzaba a cantar ‘Ven loitar’. Acto seguido, salió al escenario A Banda da Loba.