La provincia de Lugo batió el año pasado su récord histórico de solicitantes de asilo y recibió un total de 313 peticiones, una cifra que multiplica por ocho la registrada hace tan solo un lustro, en 2016, cuando se contabilizaron 38 casos. Con anterioridad a este último ejercicio, las peticiones de protección internacional en la provincia lucense eran todavía más excepcionales, con 13 expedientes iniciados en 2015, cuatro en 2014 y tan solo uno en 2013.
Y es que a los conflictos estancados en países como Siria, Afganistán, Irak, Pakistán y Nigeria se sumó la crisis política y económica de Venezuela, que provocó un éxodo masivo de migrantes. De hecho, los solicitantes venezolanos se situaron ya en 2019 en la tercera posición del ránking de demandantes de protección internacional, tan solo por detrás de sirios y afganos.
En España, concretamente, al menos un 80% de los solicitantes provienen de países sudamericanos, un perfil completamente diferente al de otros países europeos como Francia o Alemania, que reciben sobre todo afganos, iraquíes, sirios y guineanos. Según explican desde la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), esta diferencia está directamente relacionada con la política de visados que aplica España, que exige visado de tránsito a sirios, yemeníes o palestinos procedentes de Líbano, entre otros muchos, mientras que la mayoría de los ciudadanos latinoamericanos están exentos del trámite.
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En Lugo, la problemática de los refugiados sigue la misma tendencia que la registrada a nivel nacional. De hecho, desde hace ya varios años, alrededor de la mitad de los solicitantes de asilo en la provincia proceden de Venezuela, seguida de Colombia. A estos ciudadanos les siguen —a una distancia considerable— los procedentes de Honduras, Brasil, El Salvador y Cuba. La lista de solicitantes de protección internacional en Lugo se completa con algún caso procedente de otros países como Perú, República Dominicana, Ucrania, Irán, Ghana, Guatemala y Guinea.
PANDEMIA. Las peticiones de asilo en Lugo no se han frenado ni tan siquiera debido a la pandemia, lo que sí ha sucedido a nivel nacional. El cierre de fronteras, el confinamiento decretado en decenas de países y las demás medidas restrictivas para frenar el coronavirus tuvieron un gran impacto en los flujos migratorios hacia España, que registró el pasado año 88.762 peticiones de asilo, un 25% menos que en 2019, cuando se contabilizaron 116.749 casos. En la provincia lucense, sin embargo, el número de peticiones aumentó un 20%, pasando en dicho periodo de 259 a 313 expedientes.
La cifra recabada el pasado año por el Ministerio de Interior se traduce en una media de 26 peticiones al mes y todo parece indicar que seguirá aumentando a lo largo del presente año. De hecho, solo durante el pasado mes de enero se registraron en Lugo un total de 40 nuevas solicitudes, una cifra sin precedentes.
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado afirma que España solo ofrece protección internacional al 5% de los solicitantes
CONCESIONES. Los tramites para solicitar asilo en la provincia se realizan en las dependencias de la Policía Nacional de Lugo, que el año pasado tramitó todas las solicitudes recibidas. Una vez presentada correctamente la petición, el Ministerio de Interior analiza y resuelve el caso. Tal y como apunta la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, España solo ofrece protección internacional a una de cada 20 personas, un porcentaje "muy inferior" a la media europea del 30%.
"Nuestro país solo otorgó protección internacional a 5.700 personas en 2020, una cifra que no llega al 5% de las 114.919 solicitudes de asilo estudiadas. Estas cifras vuelven a empujar a España a la cola de los países de la Unión Europea en cuanto a reconocimiento de solicitudes de asilo", aseguran. El último informe publicado hace unas semanas por la CEAR detalla que España se sitúa por debajo de otras naciones como Francia (22%), Bélgica (35%), Alemania (44%) o Italia (23%) en resoluciones favorables.
Según las cifras que maneja esta ONG, actualmente, más de 79 millones de personas viven forzosamente lejos de su hogar por guerras, violencia y violaciones graves de sus derechos fundamentales, lo que supone el 1% de toda la población mundial y el número más alto jamás registrado.
Cierre de lista
La lista de solicitantes la cierra Ceuta, con 285; precedida de Cantabria, con 418 peticiones, y La Rioja, con 474.
