Lugo acoge unas 500 manifestaciones al año, la mayor parte por temas laborales

Las asociaciones ciudadanas ganaron terreno y ya organizan más protestas que sindicatos y comités de empresa. Los cambios legislativos y la sanidad también movilizaron a los lucenses
Marcha multitudinaria en apoyo del feminismo en 2019. X.PONTE
photo_camera Manifestación en defensa de Alcoa celebrada en Lugo en octubre del pasado año.
Manifestarse es un derecho. Alzar la voz públicamente para hacer visible una problemática y exigir soluciones al respecto es una salida, a la desesperada, para una ciudadanía cansada de vivir a las órdenes de una clase política distante, que tan solo escucha a golpe de megáfono. Los lucenses salieron en multitud de ocasiones a la calle para reivindicar actuaciones en diferentes ámbitos. De hecho, las cifras oficiales revelan que la provincia de Lugo acogió 3.157 manifestaciones desde 2015, lo que se traduce en una media que supera las 500 protestas anuales.

Los ciudadanos recorrieron las calles de los diferentes municipios de la provincia sujetando pancartas con alegatos sobre educación, sanidad, agricultura, política, pensiones, violencia machista y un largo etcétera, pero en los últimos tiempos, la lista de reivindicaciones estuvo encabeza por la problemática laboral. Así, más de la mitad de las protestas organizadas a lo largo de los dos últimos años –un total de 524 en 2020 y 683 en 2019– se centraron en temas relacionados con el trabajo. Y es que las manifestaciones ciudadanas se organizan a golpe de actualidad y la coyuntura laboral se presentó poco esperanzadora.

Echando la vista un poco más atrás, las estadísticas revelan que, en 2018, la lucha social estuvo encabeza por las manifestaciones en contra de diversas medidas políticas y legislativas (295 de las 738 convocadas), entre las que destacaron las protestas que se oponían al proyecto de la ordenanza cívica municipal, al considerarlo demasiado represivo). En 2017, se centraron en la Sanidad (218 de las 498 que se autorizaron).

Un año antes, los lucenses se manifestaron menos y también lo hicieron mayoritariamente por asuntos laborales, con 67 de las 223 protestas, al igual que en 2015, con 164 de las 491 marchas organizadas. Aquel año también cobraron gran peso las manifestaciones por temas agrarios, con 159 protestas en toda la provincia, donde miles de ganaderos se congregaron en varias ocasiones para reivindicar la bajada del precio de la leche en origen.

PROMOTORES. Los asuntos que animaron a los lucenses a llenar las calles para protestar unidos han ido variando a lo largo de los últimos años, cuando también se han registrado cambios con respecto a los promotores de las manifestaciones. De hecho, las asociaciones ciudadanas le han ido ganando terreno a sindicatos y comités de empresa –abanderados por excelencia de la lucha social– y en 2019 pasaron a ser, por primera vez en el último lustro, las entidades que más movilizaciones organizaron en la provincia de Lugo, ya que convocaron 442 de un total de 683.

El año anterior, el primer puesto de la lista de promotores más activos ya había estado bastante reñido, ya que los comités de empresa habían convocado 270 marchas; los sindicatos, 199, y las asociaciones ciudadanas, un total de 200.

Las cifras oficiales que maneja el Ministerio de Interior incluyen también los meses en los que más movilizaciones se llevaron a cabo, un dato que varía año tras año. En 2015, por ejemplo, el mes más reivindicativo fue noviembre, mientras que en 2016 figuraba marzo; en 2017, septiembre; en 2018, febrero, y en 2019 fue marzo.

Alrededor de 140 grupos activos en la provincia

En la provincia de Lugo funcionan actualmente alrededor de 140 asociaciones ciudadanas de distintos ámbitos, desde deportivas y culturales, hasta vecinales y estudiantiles. Según los datos oficiales del Ministerio de Interior, a fecha de 1 de enero de 2020 había registradas 137 asociaciones con domicilio social en Lugo.

Comunicación escrita
Cualquier entidad puede organizar una manifestación en la vía pública, pero es imprescindible comunicarlo por escrito a la autoridad gubernativa, por los organizadores o promotores, con una antelación mínima de 10 días y máxima de 30. En casos de urgencia podría convocarse 24 horas antes.

Sin incidentes
Impedir el ejercicio de la libertad de manifestación está castigado con penas de hasta tres años de cárcel. Las protestas convocadas en los últimos años en Lugo se desarrollaron sin incidentes destacados.

Comentarios