Un lucense acepta dos años de cárcel por falsificar tres partes médicos

Trabajaba de mediador de seguros y tenía una póliza por bajas de enfermedad, de la que cobró 760 euros

Un lucense acusado de falsificar tres partes médicos para cobrar un seguro reconoció este jueves los hechos en la Audiencia Provincial de Lugo y aceptó una condena de dos años de prisión, así como 1.440 euros de multa.

El hombre ya pagó la responsabilidad civil, por lo que el fiscal le reconoció la atenuante de reparación del daño y también la de dilaciones indebidas -ya que los hechos ocurrieron hace más de siete años-, rebajando así considerablemente su petición inicial de cinco años de cárcel.

Tal y como quedó recogido en el escrito de la Fiscalía, el acusado trabajó como mediador de seguros y además tenía contratada una póliza desde el 1 de julio de 2010. Aprovechando esa circunstancia, «con el propósito de obtener un indebido beneficio económico», presentó ante la compañía entre el 26 de octubre y el 31 de diciembre de 2010 un total de tres partes médicos simulados.

DOCUMENTOS. El primer parte llevaba fecha de 26 de octubre de 2010 e iba firmado por dos doctores de un centro de rehabilitación de la capital, a pesar de que el acusado nunca había acudido a dicha clínica.

Otro de los partes, también del mes de octubre, iba firmado por una doctora del centro de salud de Illas Canarias, al que tampoco había acudido. El tercer parte, fechado en diciembre del año 2010, llevaba la firma de un doctor del centro médico de Calde y en él se prescribía el uso de un collarín cervical.

El acusado presentó estos tres partes supuestamente manipulados ante la compañía aseguradora con la que tenía contratada la póliza, que únicamente llegó a indemnizar al hombre en la cantidad de 760 euros por uno de los siniestros.

Tal y como argumentó la Fiscalía lucense, «estos informes fueron elaborados por el acusado o por un tercero a instancias de este», por lo que acusó al hombre de un delito continuado de falsedad en documento oficial en concurso medial con un delito continuado de estafa. Las partes llegaron a un acuerdo y ya no fue necesario celebrar el juicio en la Audiencia.