La Policía Local de Lugo se movilizó en la noche del miércoles al jueves para acudir a un edificio de la zona de San Roque, donde una pareja solicitó su presencia porque sus vecinos hacían demasiado ruido cuando mantenían relaciones sexuales y les molestaban.
Tras recibir el aviso, sobre las tres menos cuarto de la madrugada, una patrulla del Grupo Operativo Nocturno se trasladó hasta el inmueble y habló con la pareja que había solicitado su intervención. Según explicaron, los ruidos procedentes de otra vivienda del edificio les impedían conciliar el sueño y señalaron además que buena parte de esas molestias eran producidas cuando sus vecinos "realizaba el acto sexual".
Los agentes se entrevistaron con ambas partes y los presuntos causantes de los ruidos negaron los hechos y ofrecieron una versión muy distinta del problema. Según apuntaron, eran los vecinos quienes hacían ruido con frecuencia e incluso a veces golpeaban el techo con un palo. Los policías calmaron los ánimos entre las dos parejas, que no quisieron formular ninguna denuncia.