Llama a la Policía porque las relaciones sexuales de sus vecinos "duran mucho"

Los agentes fueron al piso de la denunciante, pero no se escuchaban ruidos y ya no intervinieron

Una lucense llamó el pasado lunes a la comisaría de la Policía Local para denunciar las molestias que le estaban ocasionando las relaciones sexuales que supuestamente mantenían en ese momento sus vecinos. La mujer llamó de madrugada para mostrar sus quejas y explicó que la pareja que residía en el piso inmediatamente superior al suyo estaba manteniendo relaciones sexuales "poco normales", ya que "duraban mucho". Según explicó, los ruidos que se escuchaban desde su domicilio eran tan fuertes que ni ella ni sus hijos podían conciliar el sueño.

Tras recibir la llamada, una patrulla se trasladó hasta el domicilio de la denunciante para comprobar si realmente había un exceso de ruido que pudiera constituir una infracción a la ordenanza municipal de medio ambiente. Esta norma contempla los ruidos procedentes del volumen de la música —que se pueden medir con un sonómetro— y también los derivados de la actividad humana, como pueden ser los que se originan al mover muebles, cantar, e incluso al mantener relaciones sexuales.

En estos últimos supuestos, son los agentes los que tienen que realizar una valoración subjetiva del ruido. Y cuando lo consideran excesivo, identifican a los autores y levantan acta.

La mujer comentó incluso que los ruidos podrían proceder de una película pornográfica y que eso explicaría que se escucharan tanto tiempo

En el caso registrado el pasado lunes, los policías acudieron a la vivienda de la denunciante y la mujer insistió en que la duración de las relaciones sexuales de sus vecinos "no era normal", aunque no concretó cuánto tiempo exactamente los estuvo escuchando. La mujer comentó incluso que los ruidos podrían proceder de una película pornográfica, lo que explicaría, según ella, que se escucharan durante tanto tiempo.

Los agentes de la Policía Local entraron en el domicilio de la denunciante, pero en ese momento no se escuchaba ningún tipo de ruido procedente del piso superior, por lo que ya no tuvieron que intervenir ni identificar a la pareja que supuestamente mantenía relaciones sexuales excesivamente ruidosas y largas, en opinión de su vecina del piso inferior.