La limpieza realizada por el Ayuntamiento en el pórtico norte de la catedral no causó daños. El delegado de patrimonio del obispado, César Carnero, certificó este martes que el monumento no sufrió destrozos tras ser tratado con una hidrolimpiadora para retirar las pintadas hechas por vándalos.
El procedimiento que siguió el Concello está prohibido por las normas de la Dirección Xeral de Patrimonio, pero no se causaron daños y ya se enviaron fotos a la Xunta para certificar que la operación no dejó secuelas en el monumento, explicó este martes Carnero.
Añadió que existe el compromiso de que a partir de ahora cualquier intervención en la basílica se hará siguiendo protocolos respetuosos con el patrimonio y autorizados por expertos.
En tanto, el concejal de medio ambiente, Álvaro Santos, incidió en la ausencia de daños y defendió la necesidad de actuar de forma rápida en el monumento tras el ataque vandálico de hace unos días. Al tratarse de pintura es importante actuar lo antes posible para evitar la penetración a capas más profundas de la piedra, sostuvo el concejal.
Santos aseguró también que se usó en la operación agua a la menor presión posible, para que fuera efectiva la retirada de la pintura y no afectara a elementos patrimoniales. Añadió que, aunque se usó la hidrolimpiadora, se hizo manteniendo la lanza a la mayor distancia posible.
El concejal dijo que la propia diócesis solicitó en otras ocasiones al Ayuntamiento actuaciones de este tipo que se resolvieron de forma satisfactoria y sin incidencia alguna. No obstante, también apuntó que a partir de ahora se aplicará un procedimiento específico de intervención en elementos de carácter patrimonial.
Las pintadas que retiró el Concello, con un sistema que provocó críticas en las redes, fueron consecuencia de un acto vandálico en el pórtico norte y en los muros del atrio. Los ataques de gamberros se repiten con cierta regularidad en la basílica, aunque Santos opinó este martes que responden a episodios puntuales, ajenos al comportamiento de la mayoría.
El portavoz de los populares en el Concello, Ramón Carballo, también se preguntó este martes quién pagará la multa si la actuación en la catedral acaba provocando una sanción de Patrimonio. Dejó sobre la mesa si debe asumir responsabilidades el Ayuntamiento o la empresa de limpieza. En todo caso, defendió Carballo, debe establecerse un método menos agresivo para el tratamiento del monumento.
