Libre el octogenario acusado de tocamientos a una menor de edad en Lugo

Tiene una orden de alejamiento de la presunta víctima

El río Miño, a la altura del puente romano. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera Los abusos habrían tenido lugar en el puente romano. VICTORIA RODRÍGUEZ

El octogenario lucense detenido en la tarde del pasado lunes por hacer tocamientos en la zona genital a una niña de 12 años, fue puesto este martes en libertad. El hombre presentaba ciertos problemas cognitivos y se mantiene como investigado por un delito de abusos sexuales sin penetración a menor de 16 años. La jueza de guardia, según informaron desde la oficina de prensa del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, le impuso la prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima mientras se completa la instrucción.

Los hechos sucedieron a plena luz del día y en uno de los lugares preferidos por las familias lucenses para disfrutar en estos días al aire libre, el paseo del Miño, en las cercanías del puente romano. Una mujer avisó a la Policía Local de que un hombre se había acercado a su hija mientras esta se encontraba jugando en la zona y le había realizado tocamientos en la zona genital.

Personada una patrulla en el lugar, tanto la mujer denunciante como su hija identificaron sin lugar a dudas al acosador, un hombre de 80 años que se encontraba todavía sentado en un banco cercano. La Policía Local procedió a su detención como supuesto autor de un delito de abusos sexuales a una menor y lo entregó a la Policía nacional para que se realizaran las correspondientes diligencias.

EN EL JUZGADO. La Policía Nacional lo puso este martes a disposición del juzgado de instrucción 2, en funciones de guardia. Durante las pruebas practicadas se pudo comprobar que el hombre, según parece, tiene diversos problemas cognitivos. En principio, el detenido habría reconocido que efectivamente tocó a la niña, pero alegando que no era su intención abusar de la pequeña.

Dadas las circunstancias, la edad y que no tiene antecedentes por hechos similares, la jueza de guardia decidió la puesta en libertad del hombre, si bien dictó orden de alejamiento y prohibición de comunicarse con su víctima y lo mantiene como investigado por un supuesto delito de abusos sexuales sin penetración a persona menor de 16 años.