Lámpara antivirus y lucense

Rafael Teijeiro Castro es un ingeniero técnico mecánico lucense que acaba de desarrollar y sacar al mercado una lámpara con luz ultravioleta capaz de matar el coronavirus
ES DEL BARRIO del Sagrado Corazón pero se puede decir que nació allí por casualidad.

Rafael Teijeiro Castro (Lugo, 1971) dirige una empresa de ingeniería en Valladolid, Teknomechanics, que acaba de sacar al mercado una lámpara que funciona con el sistema Alba. Un artefacto que, con haces de luz ultravioleta, promete acabar con todo tipo de gérmenes –coronavirus incluido– en cualquier sala en la que se ponga a funcionar.

"La lámpara emite haces de luz ultravioleta en el espectro C, una luz azul que mata todo tipo de gérmenes -virus, bacterias y mohos- que haya sobre las superficies y también en el aire porque la radiación viaja a través del aire. Y esto está demostrado que es efectivo".

"Incluso hay un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de hace ya unos años, en el que este organismo recomienda el uso de luz ultravioleta contra un brote de tuberculosis", indica este ingeniero lucense.

El artefacto mide 1,70 metros y dispone de un cilindro de 20 centímetros de diámetro con doce lámparas ultravioleta. Se puede encender con un mando a distancia o a través de una aplicación.

SEGURIDAD. Antes de ponerse en funcionamiento, chequea si hay alguna persona en la sala. Si es así, no se enciende. Incluso, se detiene si alguien entra en ese momento. Eso se debe a que la exposición a esa luz es perjudicial para el organismo humano.

Una vez comprobado que no hay personas en la sala, la lámpara comienza a emitir la luz y en unos diez minutos puede haber finalizado el trabajo, siempre y cuando se trate de un espacio de 30 metros cuadrados de superficie.

La lámpara está siendo presentada al mercado tras haber sido diseñada y desarrollada en solo cinco meses, una vez comenzada la pandemia. En principio, su venta está enfocada a empresas y a espacios muy visitados por personas, dado que el precio no está al alcance de todos los bolsillos.

Uno de los clientes potenciales es la Diputación Provincial de Lugo, donde Rafael Teijeiro envió información sobre su producto.

"Pensamos que puede ser muy útil en espacios con mucho tránsito de personas como salas de reuniones de centros de negocios, hoteles, colegios, centros de mayores, hospitales...", afirma Rafael Teijeiro.

Pese a tener catorce patentes a su nombre relacionadas con la automoción -sector en el que trabajó durante años antes de poner en marcha esta empresa de ingeniería mecánica-, Rafael Teijeiro no se considera un inventor.

"Esa palabra, inventor, me retrotrae a grandes nombres de la ciencia como Edison, por ejemplo, y aquí de lo que se trata es, simplemente, de crear cosas para facilitar la vida a los demás", afirma.

idea. El proyecto de crear esta lámpara surgió de la situación creada con la pandemia y la necesidad de higienizar al máximo los espacios. Antes de diseñar el producto, el ingeniero lucense pensó en los distintos métodos de higienización que se estaban aplicando en la lucha contra la pandemia de covid-19.

El primero de ellos fue la lejía, pero enseguida vio que el uso masivo de este producto resulta agresivo y contaminante para el medio ambiente.

Después, pensó en el ozono, utilizado los primeros meses como desinfectante en muchos locales pero puede ser perjudicial para las personas. A base de ir descartando, dio con la luz ultravioleta.

"Esta luz se comenzó a utilizar ya en el siglo XIX y se emplea para desinfección en potabilizadoras de agua, la higienización de laboratorios biológicos y también de quirófanos en Estados Unidos. Se trata, en suma, de una tecnología segura y rapidísima. Otra ventaja que tiene es que no necesita la presencia de personas para ser activada. La lámpara lo hace todo ella sola", comenta el gerente de la empresa Teknomechanics.

El proyecto de la lámpara se complementará, en unos meses, con un nuevo sistema, también basado en luz ultravioleta en el espectro C, que irá enfocado exclusivamente a la higienización del aire. "Es algo que todavía tenemos en estudio pero sí pensamos en desarrollarlo. La idea consistiría, en este caso, en utilizar la luz ultravioleta en el espectro C para higienizar el aire, a lo que se sumarían también los filtros Hepa. Sería una manera de convertir el aire supuestamente contaminado en aire limpio, sin virus, para que se pueda entender de alguna manera", avanza el ingeniero técnico Rafael Teijeiro que, pese a marcharse de Lugo siendo solo un bebé, todavía sigue muy vinculado a la ciudad, donde tiene bastante familia y que visita varias veces al año desde que era un niño.

Aerogeneradores, defensa y motos

Teknomechanics es una empresa que nació hace siete años y está formada por tres trabajadores, todos ingenieros. La idea de su creación era la de desarrollar proyectos que diesen respuesta a los problemas que podrían tener algunas personas en su vida diaria o en su empresa. De ahí, salieron desarrollos como un equipo de elevación de aerogeneradores o una máquina automática de lavado de motos, además de otros proyectos para la industria de la defensa como una máquina de ensayo para munición.

I+D
No fue así el caso de la lámpara anticovid, ya que esta fue una apuesta propia, de casa. "La lámpara la desarrollamos como producto propio. Tenemos un departamento de I+D y, cuando disponemos de tiempo, nos dedicamos a nuestras inquietudes. Por ejemplo, además de esta lámpara, también creamos una impresora 3D de aluminio y acero", señala Rafael Teijeiro.