La Xunta abre el albergue Lug II como residencia para enfermos oncológicos

El albergue juvenil Lug II, situado en Pintor Corredoira, servirá de alojamiento a todos los pacientes oncológicos a tratamiento que deseen quedarse en Lugo a pasar la noche, así como a sus familiares. La Xunta y la Asociación Española contra el Cáncer (Aecc) firmaron este lunes un convenio que permitirá a los enfermos y sus acompañantes hacer uso se las instalaciones a un precio reducido: 8 euros por pasar la noche y 5 euros por comer.

"A intención é que a estadía dos pacientes e familiares sexa o menos gravosa posible no aspecto económico, facilitando un aloxamento confortable, con todas as prestacións, situado no centro da cidade, na rúa Pintor Corredoira, e próximo ao hospital", señaló el delegado territorial de la Xunta en Lugo, José Manuel Balseiro.

Por su parte, la presidenta de la Aecc en Lugo, Mariluz Abella, explicó que la idea de solicitar la colaboración de la Xunta para que los pacientes de la provincia tuvieran un lugar en el que pasar la noche si así lo deseaban surgió tras la puesta en funcionamiento del segundo acelerador. "Suelen ser tratamientos que se dan a diario de lunes a viernes, de forma que quizás algunos enfermos quieran pasar la noche en Lugo. La provincia es muy grande y, con el segundo acelerador, todos los enfermos se tratan en el Hula, incluidos los del Hospital da Costa", dijo.

Abella agradeció la colaboración de la Xunta y alabó las instalaciones del Lug II y el precio establecido. "Creemos que es muy razonable y que permite que todo el mundo tenga acceso. Si alguien quisiera hacer uso de este servicio y no pudiera pagarlo, estudiaríamos el caso en la asociación para ayudarle", aseguró la presidenta de la Aecc en Lugo, que acudió a la fima del convenio junto a José Luis Garza, responsable de la gestión del complejo Lug II.

Además, la iniciativa también podrá dar servicio a los familiares que acompañen a enfermos de cáncer hospitalizados y que necesiten un lugar donde descansar y asearse.

Abella destaca el hecho de que el centro cuente con actividades de voluntariado paralelas y que siga sirviendo de albergue como una ventaja fundamental, para ayudar a pacientes y acompañantes a "salir un poco del ambiente del hospital".