La Policía Nacional de Lugo destapó dos organizaciones delictivas que robaron al menos 30.500 euros en diferentes entidades bancarias de la capital lucense. Los investigadores identificaron hasta el momento a cuatro personas y propiciaron la detención de una mujer, que fue sorprendida el pasado 30 de marzo en la localidad barcelonesa de Mataró.
Esta mujer participó supuestamente en un hurto que se registró hace siete meses –en septiembre de 2015– en una sucursal bancaria sita en la Avenida da Coruña. Según confirmaron desde la comisaría de la capital, los miembros de esta banda lograron llevarse 18.500 euros utilizando el método de la siembra.
Los delincuentes entraron en el banco como si fueran clientes y aguardaron su turno. En un momento dado, uno de ellos esparció un montón de monedas por el suelo, simulando que se le habían caído, y le pidió a las personas que estaban en la cola que le ayudaran a recogerlas.
Justo en ese momento, su compinche se acercó al cajero automático y solicitó ayuda a los empleados de la entidad, ya que supuestamente no lograba realizar una operación.
Con esta argucia, la banda consiguió que se formara un pequeño revuelo y uno de sus miembros lo aprovechó para sustraer el dinero en metálico que había bajo los mostradores de atención al público, donde se realizan las entregas de efectivo.
Tras el robo, la Policía Nacional de Lugo abrió una investigación e identificó a varios integrantes de la banda, sobre los que emitió una requisitoria de búsqueda y detención. Esta gestión propició el arresto de una mujer hace dos semanas, cuando los Mossos dEscuadra la identificaron en un control rutinario en la ciudad catalana de Mataró.
Seis meses después de este suceso, a mediados del pasado marzo, otra entidad bancaria de la capital –ubicada en la Rúa da Raíña– sufrió otro robo de características similares.
Los investigadores identificaron a cuatro personas y propiciaron el arresto de una mujer en la ciudad catalana de Mataró
En esa ocasión, dos mujeres de la banda entraron en un cajero automático y fingieron que estaban realizando una operación. Sin embargo, lo que hacían era introducir un trozo de papel en la ranura de salida de los billetes, con la intención de obstruirla. Acto seguido, avisaron al empleado de la sucursal para que se acercara a ayudarlas y abandonara así su puesto de trabajo.
Mientras tanto, otra pareja del grupo, formada por un varón y una mujer, accedió a la oficina y se sentó en un banco, pasando desapercibida entre los clientes. Acto seguido, otros dos cómplices se dirigieron a un empleado para hacerle una consulta y dificultarle así la visión de lo que estaba sucediendo en otros lugares de la oficina.
La mujer que estaba sentada en el banco, aguardando supuestamente su turno, aprovechó ese momento para levantarse, acercarse al mostrador y apropiarse de todo el dinero que localizó, un total de 12.000 euros.
La delincuente introdujo los billetes en un bolso que llevaba y abandonó tranquilamente la sucursal acompañada por su compinche. La Policía Nacional investigó el robo e identificó a dos de los integrantes del grupo.
SIN RELACIÓN. Tal y como confirmó este viernes el portavoz policial, tanto la mujer detenida como las demás personas identificadas son de origen sudamericano, "pero se trata de dos grupos diferentes, sin vinculación alguna entre ellos", señaló.
Desde la comisaría lucense apuntaron igualmente que tras la identificación de algunos integrantes de las dos redes y su inclusión en la base de datos de personas buscadas en el territorio nacional, "es de esperar que puedan ser detenidas en un plazo corto de tiempo".
La investigación de los robos cometidos en las citadas entidades bancarias de la capital fue llevada a cabo por los agentes del grupo II de la Brigada Provincial de Policía Judicial.
