Una investigación sobre Fixós

La jueza De Lara investiga el papel del PXOM en el frustrado pacto de gobierno de 2007

En una nueva providencia sobre O Garañón, la jueza pide al PSOE y al BNG que identifiquen a las personas que intervinieron en las negociaciones, en particular en lo referente al urbanismo y al plan general
Negociación del frustrado pacto de gobierno de 2007
photo_camera Negociación del frustrado pacto de gobierno de 2007

La jueza Pilar de Lara sigue adelante con su investigación sobre O Garañón y acaba de emitir una sorprendente providencia: ha solicitado al PSOE de Galicia y de Lugo y al BNG de Lugo "el pacto de gobierno" de 2007 (que no existió), "identificando a las personas que intervinieron en las negociaciones, en particular en lo referente a urbanismo y al PXOM". 

A raíz de que el TSXG declarara ilegales y ilegalizables las torres y la urbanización de O Garañón, la Asociación en Defensa del Parque Rosalía de Castro pidió que volvieran a declarar los políticos y funcionarios investigados, entre los que hay tres técnicos municipales (uno ya jubilado), el exalcalde José López Orozco y los exconcejales de urbanismo José Ramón Gómez Besteiro, Francisco Fernández Liñares y María Novo. Sobre los tres técnicos, De Lara dice que "no ha lugar" a citarlos nuevamente, pero cita como testigos a otros dos funcionarios (un ingeniero y una arquitecta) y pide a la asociación que concrete por qué deben declarar nuevamente Liñares y Novo.

En ese contexto, De Lara también pide información sobre el "pacto de gobierno de 2007", que no hubo porque las negociaciones que el PSOE y el BNG mantuvieron durante varias semanas no dieron fruto y el socialista José López Orozco gobernó cuatro años en minoría. No obstante, sí fue en ese periodo (2007-2011) cuando se aprobó el plan de urbanismo, donde O Garañón fue introducido como planeamiento incorporado después de que, tras las presiones del PP, el gobierno local corrigiera el "erro", ya que inicialmente figuraba como volumetría sujeta a ordenanza específica. Eso significaría que quedaría validada por el plan, de tal forma que, en el caso de que hubiera fallo judicial firme en contra de las dos torres, realmente no sería efectiva porque el PXOM sería posterior a ese planeamiento (este comenzó en 2005) y por tanto estaría por encima.

Pilar de Lara cita a declarar como testigos en la investigación de O Garañón a un ingeniero y a una arquitecta municipales



El PXOM superó la aprobación provisional en 2009, después de una profunda revisión respecto al documento que había sido aprobado inicialmente en 2006, cuando el PSOE tenía mayoría absoluta. El plan continuó avanzando gracias al apoyo del PP y en 2010 se produjo la aprobación definitiva. Después aún tendría que superar el visto bueno de la Xunta, por lo que el plan no entró en vigor hasta marzo de 2012, aunque solo el 95%. En la parte restante, la Xunta y la Confederación Hidrográfica pidieron cambios y más estudios, que todavía se están haciendo.

NEGOCIADORES. Los negociadores del fallido pacto fueron Besteiro, concejal de urbanismo entre 1999 y 2007, en ese momento secretario local del PSOE y candidato a la presidencia de la Diputación, que asumiría en julio de ese año; José Ángel Lago Lage, secretario provincial del PSOE, y Liñares, también edil desde 1999 y responsable de urbanismo durante un breve periodo, desde 2007 hasta que en 2008 fue nombrado presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. A Besteiro se le vio precisamente este lunes por el Ayuntamiento, a donde acudió a buscar un certificado, indicó.

Por el BNG negociaron el portavoz municipal, Xosé Anxo Lage; el edil Antón Bao, que se convertiría en vicepresidente de la Diputación a las pocas semanas; Xesús Méndez, secretario comarcal del BNG y Paz Abraira, responsable local.

Las negociaciones se llevaron a cabo en el hotel Santiago y el PXOM fue, efectivamente, uno de los asuntos clave, sobre todo por el interés del BNG de modificar un plan que, en su opinión, no respondía a las necesidades del municipio ni tenía consenso político y social. En algún momento de las negociaciones, el BNG llegó a anunciar que había acuerdo para "cambiar el PXOM", aunque el PSOE lo limitaba a predisposición al consenso. Las negociaciones fracasaron en parte debido a que en el BNG había una corriente muy resistente y el PSOE no aceptó el planteamiento de los nacionalistas, que, tras la experiencia del bipartito de 1999-2003, buscaban más autonomía en sus áreas y más capacidad de influencia en las decisiones municipales.

Comentarios