La Diputación de Lugo dice que hará la playa fluvial pero en otro sitio

Álvaro Santos asegura que el proyecto se abandonó porque fue rechazado. Unas 30 personas se movilizaron contra la obra de la fábrica de la luz
Concentración contra las obras de la fábrica de la luz
photo_camera Concentración contra las obras de la fábrica de la luz

La Diputación tiene intención de retomar el proyecto de la playa fluvial, pero ubicándola en otro sitio. El portavoz del grupo socialista, Álvaro Santos, aseguró este viernes que el plan no se abandonó en el pasado por desinterés del anterior gobierno provincial, sino porque fue rechazado por el Ministerio de Medio Ambiente.

Señaló que se habían remitido toda clase de documentos para solicitar la autorización de instalarla en As Saamasas y negó que se optara por no insistir por falta de informes. Sin embargo, en su momento el gobierno provincial sí admitió que el estudio de impacto ambiental era muy complicado de sacar adelante porque implicaba consultar a gran número de administraciones y entidades.

El hecho de que Inca lograse que se aprobase el estudio de impacto ambiental para, en esa misma zona, hacer una obra que está modificando el paisaje día a día y cuyas repercusiones ambientales ya han sido denunciadas como "enormes", ha hecho que numerosos colectivos y partidos se preguntasen por qué no logró esa misma autorización la Diputación para hacer la playa. El presidente de la Confederación Hidrográfica, Francisco Marín, aseguró recientemente que no llegó a pedir el estudio de impacto ambiental y señaló que, con toda seguridad, este sería "más liviano" que el que tuvo que pedir Inca.

El portavoz provincial insistió en que se continuará con el proyecto, buscando una nueva zona para instalarla, ante la negativa del Ministerio a que se ubicara en As Saamasas. El Concello también mostró similar interés por retomar el proyecto.

CONCENTRACIÓN. Un grupo de treinta personas se concentraron este viernes en las inmediaciones de la fábrica de la luz para protestar porque se hayan autorizado unas obras que afectan de forma evidente al río y su entorno.

Los asistentes -integrados en distintas asociaciones ecologistas, vecinales, culturales y agrupaciones políticas- portaron velas y denunciaron que ya se podían percibir a simple vista los efectos de los trabajos en el Miño, que presentaba tierra en su superficie, a raíz de los movimientos realizados por Inca para construir una ataguía.

Los manifestantes acordaron también volver a concentrarse el próximo lunes, a las siete y media, frente a las instalaciones de la Confederación Hidrográfica en Lugo.

Por su parte, la adjudicataria de la explotación de la fábrica de la luz continuó el lunes trabajando en las inmediaciones del edificio. Respetando las dos órdenes que le dio la Confederación, no avanzó en la construcción del dique, ya que se le prohibió expresamente obrar en ese punto.

La firma está aún dentro del plazo para remitir la documentación precisa para legalizar el dique que hizo a 150 metros de donde estaba previsto. Si consigue autorización para esa modificación del proyecto podría continuar la obra con normalidad.

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