La declaración como bien mundial de los caminos Primitivo y Norte a Santiago y de 16 monumentos que se encuentran en estas rutas, entre ellos la catedral de Lugo, llenó de felicidad al cabildo y a todos quienes de una forma u otra forman parte de la familia de Santa María. El canónigo fabriquero y administrador de la basílica, además de delegado de Patrimonio Artístico de la diócesis, César Carnero, expresaba este lunes su felicidad y el deseo de que el título de la Unesco sea un estímulo para que a la catedral lleguen recursos «con máis facilidade» y para que el Concello de Lugo ponga un poco de más atención al entorno.
Carnero explica que los problemas derivados de la actividad de los pubs durante los fines de semana y de la mendicidad en las puertas de la catedral se están agravando de forma que ya empiezan a ser una amenaza para la conservación de algunos elementos y para la tranquilidad de las personas que acuden a rezar y de los turistas que visitan el templo. «O Concello ten unha tarefa aí, porque hai días en que o entorno da catedral é un basureiro. É tamén unha preocupación dos comerciantes da zona, un sentir xeral», explica el canónigo.
Carnero confía en que el reconocimiento de la Unesco también sirva para que instituciones públicas y privadas aporten su grano de arena para conservar y promocionar la basílica y, con ella, la ciudad. Recuerda que la declaración de la Unesco no es perpetua y puede ser retirada si no se cumple con esos deberes, responsabilidad que recae en los titulares de los bienes pero también en los estados de los que forman parte, señala el responsable del mantenimiento y la economía de la catedral.
Carnero explica que la diócesis de Lugo ha hecho en los últimos años un gran esfuerzo económico en la basílica de Santa María porque consideraba que lo necesitaba y lo merecía. La intervención de mayor envergadura y coste que llevó a cabo recientemente fue la restauración de las pinturas del altar mayor, que fueron acompañadas de trabajos de restauración en el crucero y en la fachada principal. Costaron cerca de 1,2 millones de euros, de los que el Ministerio de Fomento aportó 885.000 euros de su 1% cultural.
Ahora, la basílica está a punto de iniciar otro proyecto de gran relevancia por lo que implicará, pero para el que necesita cerrar un convenio de colaboración con una institución pública. Se trata del acondicionamiento y la apertura del museo, que lleva cerrado desde 2012. Por esas fechas se retiró la colección para revisarla y elaborar un nuevo discurso museográfico, así como para limpiar y acondicionar el espacio, el triforium. Inicialmente, la idea era restaurar el claustro y dedicar las habitaciones de uno de sus laterales a museo, pero esta actuación requiere una inversión mucho mayor que en este momento la diócesis no está en condiciones de asumir. El proyecto fue presentado a Fomento hace tiempo, con el objetivo de volver a conseguir financiación del 1% cultural, pero de momento no hay respuesta.
El museo se reabrirá, por tanto, en el espacio habitual, pero con un planteamiento totalmente distinto. Se expondrán menos piezas (aproximadamente 350), pero todas serán «de primeiro nivel, obras mestras», asegura Carnero. El resto permanecerán en almacenes de la catedral, pero con la intención de que puedan ser mostradas en circunstancias concretas. Por ejemplo, a petición de investigadores o estudiosos.
El estudio de la colección y el proyecto museográfico fueron realizados por Carolina diseñado por la historiadora del arte (especialista en la Edad Media) Carolina Casal, que ejerce como conservadora del museo. La conservación y la seguridad de las piezas son dos de los aspectos que más se han cuidado. Habrá, por ejemplo, vitrinas blindadas.
La restauración de las pinturas de la capilla mayor, la exitosa exposición Hoc Hic Mysterium... O esplendor da presenza, que durante varios meses mostró piezas relacionadas con la eucaristía de incalculable valor histórico y artístico, y las visitas a las torres de la catedral fueron iniciativas que en los últimos años contribuyeron a abrir el templo a la ciudadanía y a darlo a conocer fuera de las fronteras lucenses. Ese aperturismo se encuentra con el rechazo de algunas personas, que creen que la catedral debe de ser un lugar reservado en exclusiva al culto, pero Carnero cree que ese es un sentir «minoritario, pero fai máis ruído que o contrario» y sobre el que esas personas deben reflexionar. La ampliación de las visitas a la torre del reloj es otro de esos proyectos, que aún no se ha podido materializar por falta de medios.
Otras reacciones. El reconocimiento de la Unesco es aplaudido también por la asociación Lugo Monumental, que ultima los preparativos para emitir una credencial que promovería Lugo como punto de partida del Camino Primitivo hacia Santiago, ya que hay justo 101 kilómetros. Su presidente, Luis Latorre, cree que la materia pendiente es mejorar las condiciones de la ruta en el municipio lucense, especialmente en la entrada a la ciudad.
La alcaldesa, Lara Méndez, se sumó a las felicitaciones. Cree que la declaración es una gran oportunidad para el desarrollo turístico de la ciudad.
César Carnero Canónigo Esperamos que o recoñecemento sexa un revulsivo para que cheguen recursos con máis facilidade» Luis Latorre Preside Lugo Monumental Es prioritario mejorar el Camino, la señalización y el acondicionamiento, sobre todo en la entrada a Lugo»
