Las labores de demolición de la casa en ruinas de la Rúa Xulia Minguillón no será cuestión de unos días, sino que se prolongará en torno a un mes. Se llevará a cabo pieza a pieza, como si se tratase de un puzzle, porque más del 60% de este inmueble de dos plantas se ha venido abajo. Su gravoso coste, que el Concello de Lugo repercutirá a los propietarios, no está aún cuantificado.
La constructora contratada por el Concello por vía de urgencia inició este miércoles los trabajos con la retirada desde una máquina elevadora de aquellos elementos sueltos que amenazaban con desprenderse.
El arranque ya de por sí laborioso por el mal estado del inmueble está siendo aún más lento porque la empresa precisa elaborar un informe sobre en qué condiciones se encuentran las casas contiguas a la ruinosa en Xulia Minguillón y en Camiño Real por si presentan grietas o humedades. Los operarios, que contaron con la ayuda de agentes de la Policía Local, tuvieron dificultades para localizar a los moradores para poder acceder a sus viviendas.
El siguiente paso será retirar las piezas de la cubierta (losas, vigas...) que no se desplomaron cuando el tejado se vino abajo el miércoles de la semana pasada, día en que se precipitaron las medidas para poner fin al peligro que entraña este edificio.
La fachada se derribará planta a planta a mano con picadores neumáticos, desde máquinas elevadoras, hasta que se alcance una altura en la que pueda entrar con seguridad una pala con cizalla para que retuerza los pilares y los arranque. Antes los operarios tendrán que separar las medianeras para que las labores de demolición no dañen a los edificios contiguos.
La casa ruinosa de Xulia Minguillón se tirará pieza a pieza y llevará un mes
Más del 60% del inmueble de dos plantas, de unos 12 metros de altura, se ha venido abajo
