El juzgado de Medina saca de Bonxe al joven acusado del secuestro de su novia

La joven, de 15 años, está de vuelta en su casa y declaró que la fuga había sido voluntaria, pese a que la familia denunció el caso

Familiares y allegados del detenido, frente a los juzgados. P.V.
photo_camera Familiares y allegados del detenido, frente a los juzgados. P.V.

El joven acusado de haber raptado a su novia menor, de origen rumano, que estaba en Bonxe fue liberado, este lunes por la tarde, tras una orden dictada por el juzgado de Medina del Campo, Valladolid, donde la familia de la chica, de 15 años, había denunciado la desaparición de su domicilio, en Olmedo, y el presunto secuestro de la joven.

El juzgado vallisoletano puso fin, de esta manera, a la prisión provisional dictada por el juzgado de guardia lucense, el de Instrucción 2, que el pasado jueves ordenó la detención y el posterior ingreso en la cárcel del chico, residente en Lugo, por estos hechos.

La decisión judicial de Medina del Campo se adelantó incluso a la resolución del recurso contra el ingreso en prisión presentado por la defensa del chico, que pedía su inmediata puesta en libertad.

Inicialmente, fue el juzgado de Medina el que dictó orden de busca y captura del joven lucense, a instancias de la denuncia formulada por la familia de la chica. También fue este juzgado quien dio orden de detención del muchacho.

Sin embargo, la declaración de la joven cambió las cosas. Al parecer, la menor -que ya está de vuelta en Olmedo- declaró que su fuga del domicilio familiar había sido voluntaria.

La orden de libertad, dictada ahora por el juzgado vallisoletano, podría haberse basado en la exclusión de responsabilidad penal, regulada por el artículo 183 del Código Penal, basada en el consentimiento libre del menor de 16 años "cuando el autor sea una persona próxima por edad y grado de desarrollo o madurez".

No es habitual que se solapen las actuaciones de órganos judiciales distintos sobre un caso en concreto, sin esperar a que uno de los juzgados se inhiba a favor del otro. Sin embargo, en este caso, sí sucedió anulando la orden de prisión dada, tan solo tres días antes, por el juzgado lucense.