Cría cuervos y te sacarán los ojos. A este refrán debieron echar mano dos personas mayores que vieron como dos sobrinos suyos, en los que habían depositado su confianza para manejar sus ingresos, no les fueron leales y se quedaron con cuantiosas sumas de dinero.
Uno de ellos aceptó este viernes una condena de seis meses de prisión por un delito de apropiación indebida porque vendió en una tienda de empeño joyas de su tía, que le había pedido que se las tasasen para decidir si las vendía o no.
Hace ya siete años el acusado recibió pulseras, sortijas, pendientes y relojes, entre otras alhajas, valoradas en casi 21.000 euros, y las vendió por 4.500 euros sin el consentimiento de su propietaria, a la que tampoco entregó el dinero.
La condena quedará en suspenso si el procesado no vuelve a delinquir en dos años y le devuelve a su tía los 4.500 euros.
Por otra parte, el próximo martes se sentará en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Lugo una mujer que presuntamente estafó casi 85.000 euros a sus tíos de las cuentas corrientes que tenían en tres bancos, en las que la procesada figuraba como cotitular o autorizada.
Entre 2006 y 2009 la sobrina retiró en 59 ocasiones diversas cantidades de estas entidades financieras, que iban desde los 33 euros hasta los 11.400 euros, mediante retiradas en efectivo, cheques en ventanilla firmados por ella o transferencias.
El fiscal solicita para la acusada por un delito continuado de apropiación indebida una condena de tres años y seis meses de prisión, una multa de 3.240 euros y que devuelva los casi 85.000 con los que presuntamente se quedó.
