Investigan al dueño de Autocentrum por usurpar la marca John Deere

La multinacional lo denunció por vender maquinaria y tractores repintados y rotulados como si fueran auténticos. La Guardia Civil lleva meses investigando denuncias registradas por toda la provincia, Galicia e incluso Portugal
La Guardia Civil lleva meses investigando denuncias registradas por toda la provincia
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Eloy C.C., el lucense que más denuncias acumula por estafas en la venta de vehículos, ha sumado otra muesca a su ya largo historial: la multinacional de maquinaria agrícola John Deere ha presentado una denuncia contra él por usurpación de marca, tras detectar que podría estar vendiendo tractores y otras máquinas simulando ser un concesionario oficial de la firma. Muchos de estos tractores ni siquiera serían originales de la marca de segunda mano, sino directamente falsificados con una mano de pintura y la rotulación característica.

Eloy C.C. arrastra un largo historial de acusaciones ligadas al fraude con vehículos, la principal de ellas relacionada con Autocentrum, el concesionario de vehículos de lujo que gestionaba en Augas Férreas y que tuvo que cerrar tras ser denunciado por decenas de clientes a los que supuestamente había engañado.

Ahora, no solo la multinacional estadounidense está detrás de él. La Guardia Civil lleva meses investigando diversas denuncias por estafa con la venta de vehículos de este tipo por la provincia Lugo, el resto de Galicia e incluso Portugal. La instrucción la lleva la jueza Sandra Piñeiro, del juzgado número 2, donde también figura la denuncia presentada por John Deere. No obstante, tanto la marca como los agentes siguen pendientes de que el juzgado dicte las medidas solicitadas.

Según pudo saber este diario, las alarmas en los despachos de la cotizada marca de maquinaria agrícola saltaron cuando les comenzaron a llegar quejas de clientes con averías importantes y que alertaban de que el concesionario en el que lo habían comprado, supuestamente oficial, no se hacía cargo de las mismas.

Un despacho madrileño especializado en piratería lo ha denunciado por usurpación de la famosa marca

Una vez inspeccionados los vehículos, comprobaron que no tenían ninguna garantía de marca y que gran parte de las máquinas ni siquiera llevaban su afamada mecánica. Sencillamente, era material de segunda mano y bastante deteriorado de otras marcas que había sido pintado con el reconocible color verde de John Deere y rotulado con el logo de la multinacional.


Sus investigaciones les permitieron detectar que la maquinaria no estaba saliendo de ninguno de sus concesionarios oficiales para la zona de Lugo, sino de una nave de compraventa de segunda mano estratégicamente situada en la Nacional VI, justo a la entrada de O Ceao, junto al cuartel de Garabolos. La sorpresa de los enviados de la multinacional fue aún mayor cuando pudieron comprobar que en la fachada de dicha nave figuraba en un enorme cartel el ciervo que es el logotipo oficial de la marca, su dirección web real y su famoso eslogan, 'Nothing runs like a Deere'. Es decir, simulaba la apariencia de uno de sus concesionarios oficiales.

Los especialistas de la multinacional también pudieron comprobar que la nave estaba ligada a Eloy C.C., y que este estaba realizando importantes ventas de material agrícola por numerosos puntos de la geografía gallega y portuguesa, facturando a través de diversas empresas. De hecho, la Guardia Civil también ha incluido entre sus investigaciones supuestos delitos relacionados con el fraude fiscal, ya que todas estas operaciones podrían estar realizándose de manera opaca o, al menos, fuera del control de la Agencia Tributaria.

Otro de los aspectos que al parecer sorprendió a la multinacional fue el gran volumen de negocio y la cantidad de clientes que captaba a través de internet, con ofertas ligadas a la empresa Forst Team, una de las firmas bajo las que al parecer puede estar operando. De hecho, se da la circunstancia de que el negocio de maquinaria que dirige a la entrada de O Ceao es la primera referencia que aparece cuando uno busca en Google desde Lugo las palabras John Deere. Ni siquiera los concesionarios oficiales están mejor posicionados que él.

Con todos estos datos, el despacho de abogados madrileño especializado en piratería industrial que lleva los intereses de John Deere presentó una denuncia en los juzgados lucenses por un delito de usurpación de marca. En la misma solicitaban como primera medida que al menos se interrumpiese la actividad supuestamente delictiva de Eloy C.C. en lo que se refería a su marca, y se incautase la maquinaria que se estaba vendiendo de manera ilegal. Por otro lado, las denuncias que investiga la Guardia Civil serían por supuestas estafas, ya que provendrían de compradores a los que habría engañado.

EN LIBERTAD. Algo que llama la atención de los investigadores de la Guardia Civil, que sigue sus pasos desde hace mucho tiempo, es que Eloy C.C. haya conseguido eludir la prisión pese a todas sentencias y denuncias pendientes. Solo en una ocasión tuvo que ingresar en la cárcel, donde pasó unos meses. Fue tras una condena por obstrucción a la Justicia, tras presionar a una de sus víctimas para que retirase la denuncia e incitarla además a implicar a un policía nacional. Pese a que la condena fue solo de un año, la Audiencia Provincial se negó a suspender su ingreso en prisión «por su reticencia a cumplir las normas».

También fue juzgado en otra ocasión por un delito de alzamiento de bienes, acusado de fingir la venta de un piso a sus padres para evitar pagar las indemnizaciones y multas. Está declarado insolvente.

Pese a todo, sigue manteniendo un elevado tren de vida, siempre al volante de espectaculares coches deportivos con los que incluso compite el rallyes, su gran pasión.

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