El mismo día hubo otro caso, pero se le imputa al agresor en serie de Portomarín

Intenta violar a una joven y no irá a prisión si cumple la orden de alejamiento

El acusado reconoció que abordó a la víctima en Camiño Real el día de Año Nuevo de 2015 y no logró su propósito porque se acercó gente. Más de una decena de comerciantes reclaman al Ayuntamiento lucense explicaciones tras el cierre de la bolera motivada por un expediente
Rúa Camiño Real, donde ocurrió el suceso
photo_camera Rúa Camiño Real, donde ocurrió el suceso

Intentó violar a una joven en la capital lucense el día de Año Nuevo de 2015 y ayer lo reconoció ante el juez, pero no tendrá que ingresar en prisión si no se acerca a la víctima ni se comunica con ella en los próximos tres años. El acusado -un chico de 28 años de edad con iniciales A.A.C., que hasta el momento no tenía antecedentes penales- se confesó culpable y aceptó una condena de año y medio de cárcel.

Aun así, el acusado seguirá en libertad, ya que las partes aceptaron suspenderle la condena durante tres años si cumple el alejamiento y no vuelve a cometer ningún delito en ese periodo.

El acusado se sentó ayer en el banquillo de los acusados del Penal número 2 de Lugo y reconoció los hechos recogidos en el escrito de acusación de la Fiscalía.

El ministerio público explicó que la agresión se produjo sobre las diez de la mañana del 1 de enero de 2015, cuando la joven caminaba sola por Camiño Real.

El acusado se acercó de repente a la chica «con ánimo de satisfacer sus deseos libidinosos», la agarró con fuerza, y la empujó contra la pared. Acto seguido, comenzó a tocarle los pechos y las nalgas, al mismo tiempo que le repetía: «Vamos a follar».

La víctima, presa del pánico, intentó apartarlo insistentemente, pero no lo consiguió.

Según apuntó el fiscal, el acusado mantuvo su actitud violenta hasta que observó que se acercaban varias personas. En ese momento, soltó a la chica y se marchó del lugar.

CONFORMIDAD. El agresor fue identificado y el ministerio público lo acusó de un delito de agresión sexual. Por estos hechos, solicitaba inicialmente para el acusado una condena de tres años y medio de cárcel, así como seis años de prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de la chica o comunicarse con ella por cualquier medio.

Con la pena que pedía la Fiscalía, el joven tendría que ingresar necesariamente en prisión. Sin embargo, la partes llegaron a un acuerdo de conformidad y A.A.C. aceptó una condena considerablemente inferior: 18 meses de cárcel y cuatro años de alejamiento. Esta pena le será suspendida por un periodo de tres años.

Con este pacto, la vista oral ya no tuvo que celebrarse y no fue necesario que la víctima prestara declaración.