Intenta reventar con una baldosa la puerta de un local en A Residencia

El ladrón trató de acceder al comercio sobre las 4.30 horas, pero la alarma podría haberle ahuyentado
La baldosa, partida en tres. A.C
photo_camera La baldosa, partida en tres. A.C

"No pudo entrar, gracias a Dios. Para el ladrón sería poco, pero para mí mucho". Esta fue la reacción de la propietaria de un taller de costura del barrio de A Residencia, que este martes por la mañana, cuando abrió su negocio, se encontró con la desagradable sorpresa de que durante la noche alguien había intentado reventar, sin éxito, el cristal de la puerta de acceso al local.

Esta tentativa de robo se produjo a las cuatro y media de la madrugada en este establecimiento de la Rúa Doutor Ochoa, tal y como registraron las cámaras de videovigilancia de este taller de costura.

Pero como esas cámaras están orientadas hacia el interior del local, lo único que pudieron grabar para identificar al frustado asaltante es que vestía un pantalón de color rojo.

El ladrón se fue con las manos vacías, sin botín alguno. Probablemente puso pies en polvorosa cuando se activó la alarma del establecimiento.

"Sonó fortísimo el golpe, pero saltó la alarma, por eso huyó", afirmó la dueña, que abrió este negocio en el barrio de A Residencia en 2015.

Desistió al activarse el sistema de protección, pero también porque el cristal de la puerta contra el que arrojó la baldosa es "de seguridad", dijo la propietaria del negocio, que explicó que "está vencido, pero no roto".

PIEDRA. El asaltante se fue con las manos vacías, pero también las traía vacías para cometer su fechoría. Buscó en el entorno munición para su malogrado asalto. Pero no lo hizo en las obras públicas que se están ejecutando a pocos metros, ni en las del antiguo hospital Xeral ni en las del carril bici, sino que aprovechó para armarse las que se está ejecutando en una parcela particular, que también se encuentra en las inmediaciones del establecimiento. Allí levantó una baldosa de la acera. Tras arrojarla contra la puerta del local se partió en tres.

La propietaria del taller de costura, que dio cuenta a la Policía Nacional, aseguró que siente "un poco de miedo" e "intranquilidad" tras este intento de robo de madrugada. Además alertó a la asociación de vecinos y comerciantes del barrio para que corra la voz con el fin de que se adopten medidas preventivas para que no se repitan casos como este.