Las peluquerías lucenses se preparan ya para la reapertura al público, y si bien aún esperan que se detallen los pormenores del plan de desescalada relativos al sector ya se han puesto manos a la obra para reincorporarse a sus puestos de trabajo el día 4 en la denominada fase 0. Coinciden en que el plan de transición hacia una nueva normalidad los pilló “algo desprevenidos” pero no escatiman esfuerzos para continuar ofreciendo a sus clientes el servicio de calidad que los caracteriza.
José Sanjurjo explica que ya adquirió los equipos de protección —mascarillas, pantallas—, material deshechable como toallas o capas, y todo lo necesario “para ofrecer a máxima seguridade e sen incrementar o prezo aos clientes porque xa bastante temos enriba, aínda que todo esto supoñan gastos para nós”, afirmó.
Eva Villar: "Aún no sabemos a cuántas personas podemos atender ni cuántas podemos estar trabajando"
Durante la fase 0, el propietario de Sanjurjo Peluqueros indicó que dará cita previa en el teléfono 646.435.165 y por whatsapp, por riguroso orden de petición. “O meu local ten 16 metros cadrados así que só poderá entrar unha persoa de cada vez, e logo de cada servicio farei unha desinfección exhaustiva, pois onte mesmo acabo de adquirir unha máquina para esterilizar o local”, explicó. “Non vou a permitir a entrada a un novo cliente ata que esté rematada a desinfección. É mellor atender a menos persoas nun día, pero con seguridade”, añadió.
Eva Villar, de Gala Group considera que deben desarrollarse y explicarse bien las medidas de seguridad “porque todavía no sabemos si está limitado el aforo y a cuantas personas se pueden atender en un salón grande como el nuestro. Sabemos que tenemos que dar cita previa pero no el número de personas que podemos trabajar”.
José Sanjurjo: "Logo de cada servicio farei unha desinfección exhaustiva do local e haberá que pedir cita por teléfono ou whatsapp"
Las dimensiones se las peluquerías y los salones de belleza se presentan como el principal hándicap a la hora de adaptarse a las normas de seguridad y las medidas establecidas en el programa de desescalada, así como la distancia, “porque en peluquería no podemos trabajar a un metro de distancia. Estamos pegadas a las clientas”, añade Villar.
Natalia López, propietaria de Natalia Estilistas comparte la valoración de que es necesario que el Gobierno especifique las medidas y añade que “estamos deseando poder volver a trabajar, pero debemos hacerlo garantizando la seguridad a nuestros clientes”.
