Dentro del amplio abanico de personalidades que han pasado por Lugo, muchos de ellos nacieron, vivieron o mantuvieron un estrecho vínculo con la ciudad, lo que a día de hoy se les reconoce con placas distintivas en las viviendas que ocuparon.
En esta lista, que no cuenta con la totalidad de ilustres, se identifican actrices, escritores, políticos, pintoras o médicos. El caso que genera mayor controversia es el de la poeta y novelista Rosalía de Castro, la que cuenta con una placa en la Calle das Nóreas a pesar de que diferentes historiadores aseguran que nunca residió de forma permanente en Lugo.
El primero de los componentes de esta enumeración es el político, escritor y periodista Aureliano José Pereira. Perteneció a una familia humilde que carecía de medios para su formación académica, por lo que fue autodidacta, lo que le permitió destacar rápidamente para comenzar a publicar en medios regionales y nacionales con tan solo 20 años. Llegó a dirigir el Diario de Lugo desde 1879, lo que le llevó a su momento de plenitud con la fundación de El Regional (1884). Pasó sus últimos años en Madrid.
La pintora Xulia Minguillón es la que tuvo una menor relación con la ciudad, pues solo pasó su infancia
Luis Benigno Vázquez Fernández-Pimentel, más conocido como Luis Pimentel vivió la mayor parte de su vida en Lugo. En 1914 se desplazó a Compostela para estudiar Medicina, donde escribió sus primeros versos en español. El doctorado lo realizó en Madrid, donde coincidió con ilustres figuras de la Generación del 27.
A su regreso a Lugo entró a formar parte de la directiva del Círculo de las Artes. Forjó buenas amistades con personalidades como Ánxel Fole, colaborando además, entre otras publicaciones, con El Progreso. Su único libro publicado en vida -Triscos, en 1950-fue escrito en gallego, a pesar de que muchas de sus obras fueron traducidas a este idioma por su origen castellano.
El escritor Xesús Lorenzo Varela, a quien se le recuerda en un placa de Recatelo, nació a bordo de un barco a la entrada de la bahía de La Habana. Con cuatro años se trasladó junto a su familia a Buenos Aires, pero en pocos meses regresó a Lugo, ya que sus padres eran emigrantes originarios de Monterroso. En la ciudad lucense cursó bachillerato y se inició en la política en diferentes actos del Partido Galeguista, donde conoció a ilustres personalidades como Castelao. En 1935 decide desplazarse a Madrid donde falleció años después, a pesar de que sus restos se localizan en el cementerio familiar de Monterroso.
Ricardo Carballo Calero nació en Ferrol, donde publicó sus primeros versos. Estudió por libre bachillerato para, a continuación, formarse en Derecho, Filosofía y Letras en Compostela, donde entró en contacto con el galleguismo y se inició en el activismo estudiantil. Fue recluido en la cárcel tras la Guerra Civil por separatista. Posteriormente, regresó a Lugo con libertad condicional sin poder ejercer cargo público, por lo que se refugió en la enseñanza privada en el colegio Fingoy.
En Campo Castelo tienen una placa los hermanos Correa Calderón. Asunción Correa vivió la mayor parte de su vida en Galicia, salvo una breve estancia en Madrid donde publicó su obra "Estampas Castellanas" y entró en contacto con las vanguardias. Sus principales obras tuvieron una relación directa con Lugo. En la década de 1930 publicó repetidos cuentos en el periódico Vanguardia Gallega, propiedad de su familia. La temática de su producción tiene unos referentes claros: Santiago y su querido Valle de Neira de Rei.
Su hermano Evaristo fundó con Pardo de Neyra y Díaz Moreno la Irmandade Galega de Baralla para después organizar la Irmandade da Fala de Lugo. Ya en Madrid se relacionó con diversos autores, lo que posibilitó la entrada de las letras gallegas en el vanguardismo literario.
En su regreso a Galicia, Evaristo Correa Calderón fundó la revista 'Ronsel' y procedió a situar a Lugo como el epicentro de las vanguardias gallegas. Destacó como uno de los más firmes valores del reintegracionismo lingüístico gallego. Tras un fugaz paso por Europa regresó a Lugo, donde fundó el ya mencionado e innovador periódico Vanguardia Gallega.
LOS MENOS ARRAIGADOS. La infancia de Juan Rof Carballo, hijo de Rof Codina, se desarrolló en Lugo hasta que emprendió sus estudios de Medicina en la facultad de Santiago influenciado por su padre. No estuvo mucho tiempo en la capital gallega, ya que emigró a Barcelona para acabar allí su formación. Tras un breve paso por Madrid decidió viajar a diferentes partes de Europa como Viena, Colonia, Berlín, París o Copenhague para conocer las metodologías que allí se empleaban. En 1969 ingresó como académico de número en la Real Academia Nacional de Medicina y en 1983 fue elegido académico de número de la Real Academia Española.
Por su parte, Prudencia Grifell fue una actriz y tiple cómica mexicana nacida en Lugo. Su padre era un intérprete cubano que le introdujo el interés por este oficio, en el que se inició a la temprana edad de los 14 años, ya en una zarzuela de Caracas. Allí conoció al actor Paco Martínez, con el que se casó y regresó a España en 1899.
Volvió a México en 1904 y continuó con su carrera en los escenarios. Allí montó una compañía con la que hizo múltiples giras por América.
Finalmente, la pintora Xulia Minguillón es la que tuvo una menor relación con la ciudad, pues solo pasó su infancia. Comenzó su formación artística en Valladolid y la completó en Madrid. Su estilo, muy próximo al naturalismo, marcó las obras gallegas posteriores. Retornó a Galicia, donde la eligieron académica de la Real Academia Gallega, y finalmente falleció en Madrid tras su paso por América.
