La tragedia visitó este lunes la aldea de Vilar, en la parroquia de Santiago de Meilán de la capital lucense, para llevarse la vida de dos hermanos, intoxicados por la inhalación de gases en su casa familiar. Se trata de José Luis N.R, de 54 años de edad, y Víctor N.R, de 48 años, que vivían solos en la vivienda.
Según medios policiales, su sala de alertas recibió un aviso poco antes de las cuatro de la tarde que informaba de una posible desgracia en la casa número 11 de Vilar, en Meilán. Los agentes tuvieron que preguntar a los vecinos cuál era la vivienda unifamiliar de los hermanos porque esta, que se encuentra pegada a la carretera vieja de Ombreiro, no tenía placa con número.
Cuando los policías nacionales llegaron, comprobaron que no había ya nada que hacer por ambos hermanos. Ni siquiera fue necesario avisar a los Bomberos, porque, pese a que la casa estaba llena de hollín, ya se habían extinguido las llamas que no afectaron a la estructura del inmueble. Todo hace pensar en una muerte por inhalación de gases.
Los agentes, tras una primera inspección, formaron la hipótesis de que el fuego fue causado por un teléfono móvil que se estaba cargando. Un cortocircuito en el enchufe por el mal estado de la instalación eléctrica habría provocado un chispa que prendió en alguno de los enseres de la habitación en la que se registró este accidente doméstico. El olor a quemado, pese a la ausencia de llamas, era muy persistente.
A las puertas de la casa quedaban el turismo de los hermanos y sus dos perros
Prácticamente nadie en Vilar se enteró de lo que pasó hasta que la presencia policial se hizo evidente. Según explicaron a El Progreso vecinos de este lugar, la casa en la que habitaban los dos hermanos había sido la de sus padres.
Los vecinos relatan que hace unos seis años, coincidiendo con el fallecimiento del padre, uno de los hermanos regresó a la casa. Hace alrededor de un año volvía el otro a Meilán. Este lunes a la entrada de esta vivienda unifamiliar quedaban un turismo y dos perros.
Las muestras de pesar de amigos de los fallecidos, que era muy apreciados, se han sucedido en las redes sociales. La capilla ardiente se instalará en la tarde de este martes en el tanatorio Velatorios Lucenses de As Arieiras, en donde se oficiará una misa a las 20.30 horas.