Hallan momificado en un piso del Lugo el cadáver de una septuagenaria

La mujer falleció hace meses y nadie la echó de menos hasta el pasado viernes, cuando una amiga denunció su desaparición

El cuerpo de la septuagenaria fue hallado en el interior de un edificio de la calle Miguel de Cervantes. P.V.
photo_camera El cuerpo de la septuagenaria fue hallado en el interior de un edificio de la calle Miguel de Cervantes. P.V.

La Policía Nacional de Lugo localizó este sábado el cadáver momificado de una septuagenaria en una vivienda de la calle Miguel de Cervantes. El triste hallazgo se produjo poco después de las once de la mañana y conmocionó a los vecinos, que no daban crédito a lo sucedido.

Según explicaron, la mujer, que no tiene hijos, vivía sola en su domicilio y apenas salía. "Tenía problemas de corazón y estaba mucho en casa. Además, no se relacionaba demasiado con los vecinos. No hace mucho tiempo vimos como se la llevaba una ambulancia en dos ocasiones y pasó varios días en el hospital. Luego regresó y nos dijo que ya estaba mejor. Últimamente no la veíamos, pero tampoco nos extrañó demasiado".

Los residentes del inmueble reconocen que el coche de la mujer llevaba mucho tiempo parado en el garaje, acumulando polvo. Además, las cartas se apilaban en su buzón sin que nadie las recogiera. Sin embargo, estas circunstancias tampoco sobresaltaron al vecindario. "En una ocasión no la vimos durante una larga temporada y al volver nos dijo que había ido a visitar a unos amigos que tenía en la zona de la costa. Además, hace poco le comentó a una vecina que estaba pensando en irse a vivir a una residencia, así que era probable que se hubiera ido a algún sitio sin decirnos nada. No nos pareció extraño".

Sin embargo, el pasado viernes saltó la alarma cuando una amiga de la fallecida, preocupada porque no era capaz de localizarla, acudió al edificio y llamó a las puertas de varios pisos para preguntar por ella. Como nadie había visto a la mujer en los últimos meses, la amiga decidió acudir a la comisaría de la Policía Nacional y denunciar su desaparición.

Los agentes localizaron a un hermano de la mujer, que también desconocía su paradero. "Era la familia que tenía", afirman los vecinos, "pero por lo que decía ella tampoco se relacionaban con demasiada frecuencia".

HALLAZGO. El hombre acudió el sábado al domicilio de la septuagenaria acompañado por varias patrullas de la Policía Nacional y agentes del grupo de Científica, además de un cerrajero, que abrió la puerta de la vivienda. Una vez dentro, localizaron el cadáver de la mujer y comprobaron que se encontraba momificado. A la espera de los resultados de la autopsia, el estado que presentaba el cuerpo ya evidenciaba que el óbito se produjo hace varios meses.

La desconsoladora noticia se extendió rápidamente por el vecindario y los residentes se mostraron conmocionados. "No damos crédito. De verdad que no lo sospechábamos. Además, para llevar tanto tiempo fallecida no se percibía ningún olor extraño ni nada que nos llamara la atención", comentaron.

Según explican los forenses, en estos casos es habitual que el cadáver no desprenda ningún mal olor, ya que la momificación natural -que se produce cuando se dan determinadas condiciones ambientales- detiene el proceso de la putrefacción.

Varios vecinos observaron apesadumbrados como la funeraria retiraba el cuerpo sin vida de la septuagenaria, un final que muestra la cara más triste de la soledad que sufren muchos mayores.