Funcionarios de la Diputación de Lugo pelean con Sanitas para que se les dé de baja del seguro sanitario, ya que se les han seguido cargando recibos a pesar de que desde el pasado 1 de abril cambiaron el contrato para pasarse a otro seguro médico.
Algunos de los afectados avanzaron su decisión de acudir a Consumo ante el trastorno que les está generando recibir cargos bancarios que se ven obligados a devolver, puesto que ya no reciben los servicios sanitarios de la compañía aseguradora.
El problema, en realidad, afecta a los funcionarios de forma paralela, dado que a ellos el cargo por el seguro sanitario se les descuenta directamente de la nómina. El problema es por las personas que aparecen como beneficiarias de su seguro, es decir, parejas, hijos o padres. Es el recibo de estos el que se les sigue intentando cargar en el banco.
Algunos afectados prevén acudir a Consumo tras tener que devolver cargos bancarios
María José Castro, del sindicato CSIF, explicó que el seguro, aunque se negocia para todo el personal de la Diputación Provincial, es individual y que la compañía obligó por ello a que cada beneficiario comunicara su baja del servicio sanitario. Aunque ese trámite se hizo en tiempo y forma, la aseguradora alegó inicialmente que el trámite no se había hecho correctamente y que por eso seguía aplicando los recibos.
Una comisión en la que están CSIF, CC.OO. y CIG ha estado negociando con la empresa y Castro indicó este lunes que la aseguradora acabó admitiendo que la baja del contrato se había hecho correctamente y que, por tanto, se dejarían de girar los recibos. A pesar de ese reconocimiento, algunos funcionarios han vuelto a recibir correos reclamando pagos, dijo.
Los trabajadores se quejan, además, del tono de algunos de los correos, que consideran "amenazantes", razón por la que algunos dicen que han decidido pedir la intervención de Consumo.
