El día ocho de marzo hará seis años que Francisco Cacharro Pardo falleció.
A Paco Cacharro y a mí nos unían varias cosas y una es que los dos éramos hijos de republicanos; el nació en Guarromán (Jaén) y yo en París (Francia).
Paco fue inspector de Enseñanza Primaria en Lugo desde 1973- 1981. Senador desde 1979 a 2009, primero por AP y después por PP. Fue el primer conselleiro de Educación de la Xunta, desde 1982 a 1983. También fue presidente de la Diputación de Lugo desde 1983 hasta 2007.
Era una persona que siempre tenía una palabra amable para la gente; hablaba con todo el mundo y su despacho estaba siempre abierto a toda clase de personas.
En su mandato de 24 años al frente de la Diputación hizo muchas cosas por la provincia, pero de la que más orgulloso estaba era del campus universitario, poniendo varias facultades. De entre todas ellas, la que más orgullo le producía era la de Veterinaria, la cual está considerada entre las mejores de España.
Me comentaba que Lugo era una ciudad de servicios y con este campus decía que los alumnos vendrían a estudiar a Lugo y que los de Lugo disponían de varias facultades para realizar sus estudios sin tener que marcharse fuera a estudiar. Añadía que Lugo era una ciudad de servicios y al haber desaparecido los cuarteles de militares pues se notaban en la economía de la ciudad.
El Partido Popular, al día siguiente de su fallecimiento, solicitó al señor Orozco como alcalde que le dieran la medalla de oro de la ciudad, cosa que no le concedió.
Yo, al cumplirse el primer aniversario, por este medio le pedí a la señora alcaldesa, ya que estaban con el cambio de nombres del callejero, que se acordaran del nombre de Cacharro, pero han pasado los años y se han puesto nombres a nuevas calles, pero el de Francisco Cacharro Pardo no se puso, y ahora vuelvo a pedirle a la señora alcaldesa que se acuerde de ponerle el nombre a una calle.
El lunes, día ocho, a las seis de la tarde, se celebrará una misa por su alma en la iglesia de San Antonio.
