Un camello se sentará este lunes en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Lugo para ser juzgado porque presuntamente le intervinieron casi 200 gramos de cocaína cuando trapicheaba en las inmediaciones de la comandancia de la Guardia Civil en la capital lucense.
El fiscal solicita para el procesado una pena de cinco años de prisión por un delito contra la salud pública. El ministerio público propone que la condena sea sustituida por su expulsión de España, con la prohibición de regresar en un plazo de diez años. Reclama asimismo una multa de 88.596 euros.
La Policía Nacional montó en agosto del año pasado un dispositivo de vigilancia en la calle Salvador de Madariaga de la capital lucense, tras averiguar que se producía en esta zona la venta de drogas a toxicómanos.
Los agentes interceptaron al acusado en la calle. Tras identificarlo, le cachearon y le hallaron encima tres fragmentos de cocaína, que pesaban casi 200 gramos en total. La droga fue tasada pericialmente en unos 40.415 euros.
Cuando arrestaron al camello, los efectivos policiales le intervinieron 736 euros en metálico, que sostienen que los obtuvo con el ilícito tráfico de drogas, así como un teléfono móvil.
El juzgado que instruyó entonces el caso declaró la prisión provisional, comunicada y sin fianza de este ciudadano extranjero.
