La Federación de Asociacións de Veciños Lucus Augusti presentó un exhaustivo estudio del estado actual de muchos de los pasos de peatones ubicados en las principales arterias viales de la ciudad y determinó, tras efectuar las comprobaciones previas, que "a conclusión á que chegamos é que os pasos de peóns atópanse en moi mal estado, moitos borrados ou con pintura deteriorada e outros a medias", aseguran.
Esta última denuncia de la Federación de la Asociación de Veciños se une a otras anteriores dirigidas hacia las concejalías controladas por el BNG.
El casco histórico y los barrios de A Piringalla, Sagrado Corazón, Residencia, Paradai, San Roque, Montirón, As Gándaras, Augas Férreas, Fingoi, A Milagrosa, Casás y O Castiñeiro fueron objeto de un minucioso repaso para denunciar la escasa visibilidad tanto para peatones como para conductores, y cuyo deteriorado estado de conservación podría provocar algún accidente.
La respuesta no tardó en llegar por parte del área de Movilidad del Concello de Lugo, desde donde reconocen la existencia de este problema vial y aseguran "que nas próximas semanas comezarán os traballos de repintado de todos os pasos de peóns da cidade".
La adjudicación de las obras de la señalización horizontal de la ciudad ya se cerró y fue adjudicado a dos empresas distintas "que traballarán o mesmo tempo desde distintos puntos da cidade para que o pintado dos pasos de peóns e as sinais quede rematado canto antes", señalaron desde movilidad, que recientemente atribuyó a las dificultades que trajo el Covid el retraso en el repintado.
ADJUDICACIÓN. El repintado de la señalización viaria de la ciudad se dividió en cuatro lotes, con el objetivo de que el trabajo se lleve a cabo de forma uniforme en toda la ciudad. Dos empresas del sector se llevaron la adjudicación de una inversión total que asciende a 505.306 euros y el plazo para la realización del trabajo será de cuatro meses.
La operación conllevará algunos cambios en la señalización vial, como la eliminación de una línea en los pasos de peatones para evitar los resbalones de motocicletas y bicicletas.
También las plazas de aparcamiento para personas con discapacidad se modificarán, ya que se ampliarán sus dimensiones para facilitar su uso. Además, los pasos regulados por semáforo pasarán a tener pintado su forma mediante dos líneas discontinuas. Se trata también de adaptar las señales a los cambios en la movilidad urbana, como apuntó Rubén Arroxo, concejal de Movilidad.
El edil matizó que la emergencia sanitaria y la magnitud del proyecto, que incluye el repintado de toda la ciudad, impidieron que se cerrara antes el proceso de contratación de dichos trabajos.
