El fallido rescate de un corzo en el río Miño generó una gran expectación

Un amplio dispositivo se movilizó para intentar sacar al animal de una zona en la que había caído, con agua y mucha maleza, pero todos los esfuerzos fueron finalmente inútiles
El rescate del animal concentró ayer en la zona de la fábrica de la luz un gran dispositivo. XESÚS PONTE
photo_camera El rescate del animal concentró ayer en la zona de la fábrica de la luz un gran dispositivo. XESÚS PONTE

El amplio dispositivo desplegado en el entorno del río Miño para rescatar a un corzo se disolvió sin éxito. La operación fue seguida por muchos curiosos y, aunque los agentes se volcaron en intentar sacar al animal, finalmente no fue posible.

Hasta las inmediaciones de la fábrica de la luz se desplazaron este miércoles por la tarde bomberos, Policía Local, agentes ambientales y efectivos de Protección Civil para colaborar en el rescate. Habían sido avisados de que el corzo se había caído a una zona con agua y una maleza muy tupida por lo que resultaba complicado maniobrar para moverlo.

El animal, posiblemente asustado, se escondió lejos del alcance de los profesionales por lo que acabó por adentrarse aún más en el río de lo que estaba inicialmente. El rescate generó mucha expectación entre las personas que pasaban por esta zona en la que muchos lucenses salen a pasear y hacer deporte. Además, el hecho de que hiciera buen tiempo contribuyó a aumentar la presencia de gente.

Los bomberos se afanaron en mover la maleza para ver si, apartándola, mejoraba la visibilidad y conseguían localizar el punto exacto en el que se encontraba el animal y daban con alguna manera de sacarlo del agua. Sin embargo, les resultó imposible. El tramo concreto en el que se ocultó está lleno de ramas y plantas muy tupidas, además de que se trata de un punto de muy difícil acceso.

Los bomberos, durante el intento de rescate del corzo en la fábrica de la luz. CEDIDAS
Los bomberos, durante el intento de rescate del corzo en la fábrica de la luz. CEDIDAS

No es la primera vez en la que se produce en la ciudad un amplio despliegue para rescatar a un corzo. En mayo de 2020, uno de estos animales quedó atrapado en la verja del lugar de Astrar, en la parroquia de Pedreda.

El animal se había introducido entre los barrotes de una verja de una finca semiabandonada. Cuando fue encontrado ya llevaba tiempo así y, de hecho, había hecho grandes esfuerzos por liberarse por lo que presentaba importantes heridas y desgarros.

Los agentes de Medio Ambiente tuvieron que disparar un dardo tranquilizante para poder ayudar al corzo ya que se encontraba tan nervioso que no se dejaba. Aunque en ese caso pudieron rescatarlo, lo cierto es que cuando los veterinarios del hospital Rof Codina comprobaron el estado en el que se encontraba el animal decidieron aplicarle la eutanasia.