Expertos en la Muralla analizan los trabajos realizados y los retos de futuro

Hablaron de la necesidad de coordinar las necesarias actuaciones para conservar y poner en valor el monumento Patrimonio de la Humanidad con el respeto a la rica biodiversidad que encuentra acomodo entre sus piedras

Mesa redonda sobre la Muralla. SEBAS SENANDE
photo_camera Mesa redonda sobre la Muralla. SEBAS SENANDE

Expertos en el cuidado y conservación del Muralla romana de Lugo hablaron este sábado de la necesidad de coordinar las necesarias actuaciones para conservar y poner en valor el monumento Patrimonio de la Humanidad con el respeto a la rica biodiversidad que encuentra acomodo entre sus piedras, donde anida cada primavera una de las poblaciones de cirrios más importantes del noroeste peninsular.

Fue una de las conclusiones de la mesa redonda organizada por la Xunta de Galicia para conmemorar el décimo octavo aniversario de la declaración de la Muralla de Lugo como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, en la que participaron responsables del cuidado del monumento para hablar sobre su estado de conservación y sobre medidas a adoptar en el futuro.

El delegado territorial de la Xunta, José Manuel Balseiro, fue el encargado de inaugurar el acto, que tuvo lugar en el salón de actos de la Delegación de la administración autonómica en Lugo, enmarcando dentro de la celebración del Año Europeo del Patrimonio Cultural, bajo el título Un relato de historia y naturaleza.

Para hablar sobre los distintos trabajos de conservación y restauración ejecutados por la Consellería de Cultura durante los últimos años, Balseiro aclaró que en la mesa redonda se sentaron "los principales responsables de la ejecución de esos proyectos y, por lo tanto, los mejores conocedores, a día de hoy, del estado en el que se encuentra el monumento, a nivel de investigación y conservación".

En la mesa redonda participó el arquitecto responsable de las actuaciones de conservación en la Muralla, José Ignacio López de Rego Uriarte; el director de las intervenciones arqueológicas, Celso Rodríguez Cao; la profesora de Botánica de la USC Elvira Díaz, una de las responsables de los ensayos con bioherbicidas en el monumento; y Antonio Callejo, jefe de sección de Biodiversidade de la Xunta en Lugo.
Como moderador actuó Ruben Álvarez, técnico do servicio de Arqueoloxía de la Consellería de Cultura.

Los participantes se ocuparon de explicar cómo se han desarrollado esos trabajos de conservación, los objetivos que se perseguían, los problemas suscitados, los resultados obtenidos y las posibilidades y retos de futuro, entre los que destaca conjugar el cuidado del monumento y el respeto a la colonia de aves que anida en él de forma estacional.

"La Muralla es también un espacio público, de la que los ciudadanos disfrutan cada día. Esa es una de las características fundamentales a tener en cuenta en relación con otros monumentos o espacios que disfrutan de la misa declaración por parte del Unesco", dijo Balseiro, porque "vive integrado en la ciudad".

Por ello, recordó que hay que "aprender a hacer compatible su uso público con la debida protección patrimonial", añadió.

"Hace tiempo que la muralla sirvió para cerrar la ciudad, pero ahora es un punto de encuentro con el resto del mundo. Es el símbolo del pasado, pero también el mejor legado para las generaciones presentes y futuras", señaló el delegado.

Además, fue inaugurada en el vestíbulo de la propia Delegación una exposición formada por diversos paneles que describen de forma gráfica las actuaciones realizadas en los últimos años y las propuestas que se van a desarrollar en los próximos meses.