El de la Rúa San Eufrasio con Ronda das Fontiñas es uno de los cruces del casco urbano de la capital lucense más conflictivo, debido a que se suelen registrar con relativa frecuencia accidentes de circulación y atascos.
Un estudio de tráfico mediante simulación elaborado por Andrea Calderón Rodríguez, titulada de Ingeniería Civil de la Escuela Politécnica Superior del campus lucense, propone construir la glorieta prevista en esta zona para, por una parte, mejorar la seguridad vial y, por otra parte, que la circulación sea más fluida, lo que redundaría en una reducción de los tiempos de viaje y de demora.
Este es el primer informe de este tipo que se ha realizado sobre "una de las intersecciones más problemáticas de la ciudad", tal y como también la considera su autora. La construcción de una rotonda es una vieja demanda planteada por el Concello de Lugo y colectivos sociales.
Uno de los obstáculos a salvar para que se pueda llevar a la práctica esta infraestructura son los dimes y diretes sobre qué administración tendría que ejecutar las obras, ya que la Rúa San Eufrasio es de titularidad autonómica (carretera de A Fonsagrada) y la Ronda das Fontiñas local.
Otra posible traba, que ya es una cuestión técnica, es la "fuerte" pendiente existente, de hasta el 12%, a la que también alude Andrea Calderón en su estudio.
Esta titulada de Ingeniería Civil concluye que la glorieta es "la solución más adecuada para la optimización del tráfico" en este cruce frente a la otra alternativa que analizó, su regulación mediante semáforos. Actualmente existen señales verticales y horizontales de ceda el paso y stop.
Uno de los argumentos que avalaría que se acometiese esa infraestructura en este cruce de la capital lucense es que permitiría que se eliminase el giro a la izquierda que tienen que realizar los vehículos que circulan por la Ronda das Fontiñas hacia la carretera de A Fonsagrada -en dirección hacia la estación de ferrocarril-.
En ese punto "no hay mucha visibilidad, aunque sí que hay un espejo para facilitar la maniobra", según explica Andrea Gallego, quien añade que "esta situación obliga a los vehículos a realizar un stop antinatural para tener mayor visión y llevar a cabo la incorporación con seguridad".
AFOROS. La autora, que estudió el flujo de tráfico que soporta este cruce en diferentes días laborables a primera hora de la mañana, al mediodía y a última hora de la tarde, comprobó que el pico de la gráfica se alcanza entre las dos y cuatro de la tarde, con 2.905 vehículos. De 19.00 a 21.00 horas contabilizó 2.862 y de 8.00 a 10.00 horas, 2.522.
También comprobó que el movimiento que registra un mayor flujo es el de los vehículos que se dirigen de Fontiñas a San Eufrasio, en dirección hacia la estación del tren, en donde se suelen registrar largas colas.
El tráfico en esa zona creció tras la apertura del Hula, ya que muchos de los conductores que acuden al hospital lo hacen por la carretera de Fonsagrada.
RIESGOS. Este estudio también refleja comportamientos indebidos de conductores. Andrea Calderón observó como vehículos que se dirigían a Fontiñas "realizaron un giro prohibido, con el objetivo de evitar la congestión que suele haber durante las horas puntas" en esta ronda.
"En el stop se produjeron situaciones peligrosas. Varios vehículos realizaron el giro con poco margen de seguridad, obligando a parar a los vehículos que tenían prioridad de paso para evitar colisionar", precisa la autora.
Este proyecto se realizó con "un potente software de simulación", denominado Aimsun, que proporciona una representación virtual animada de lo que ocurre en la realidad.
"La optimización del tráfico en las ciudades requiere de tecnología avanzada para gestionar de forma eficaz la movilidad de vehículos y personas", dice Andrea Calderón, que tuvo como tutores de este trabajo a los profesores de Ingeniería Civil de la Escola Politécnica Superior Alberte Castro y David Cota.
