Los estancos de Lugo comenzaron a ver sus ventas disparadas el viernes por la tarde, tras el anuncio de la declaración del estado de alarma en España y de emergencia sanitaria en Galicia. A pesar de que, según conformó el viernes Núñez Feijóo y el sábado corroboró Pedro Sánchez a nivel estatal, los estancos serán uno de los establecimientos que se mantendrán abiertos, los lucenses triplicaron la visita a los mismos, según afirman desde los estancos consultados.
Estos establecimientos también tuvieron que gestionar colas y adaptarse para para cumplir con la distancia de seguridad mínima requerida para respetar las medidas sanitarias. Algunos pusieron cintas para marcar el espacio con respecto al mostrador, y otros salieron a la misma puerta para evitar aglomeraciones.
"Facilitamos o pago con tarxeta para evitar o contacto e un de nós esperou na rúa para que non se producisen aglomeracións. A xente felicitounos", comentan desde el estanco Pedro Cava, en la Rúa Ourense.
La gran mayoría de los estanqueros también destaca la responsabilidad de sus clientes por mantener las distancias.
EL PROGRESO, AGOTADO. El Progreso se agotó en numerosos establecimientos, en algunos a primera hora de la mañana. "La gente quiere leer el periódico. Algunos lo leen en los bares, pero ahora al estar cerrados lo quieren comprar", comentaron desde el estanco Gemma, en la Avenida da Coruña.