Un trabajador del servicio de limpieza de Lugo encontró a finales de abril, en el interior de una bolsa, lo que parecían restos de un cráneo humano y que, según confirmaron a Efe fuentes policiales, fueron enviados al Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) para su análisis.
Los mismos informadores indicaron que el hallazgo se produjo al final de la Avenida da Coruña y que el trabajador que se encontró la bolsa, superada la primera impresión, llamó de inmediato a la Policía Nacional, que se hizo cargo de los restos.
Dentro de la bolsa había restos de lo que parecía un cráneo humano, al que le faltaba la parte de la mandíbula.
Además, en la calavera había una serie "de marcas" que apuntan a que pudo haber sido empleada por un estudiante de medicina, extremo que, en cualquier caso, está aún por determinar.
De la investigación se hizo cargo el Juzgado de Instrucción Número 2 de Lugo, que estaba en funciones de guardia el día que se produjo el hallazgo.
Se esperan los resultados del análisis del Imelga para avanzar en la investigación y, sobre todo, determinar el origen de los citados restos humanos.
