Los empleados de la Diputación Provincial de Lugo retoman este lunes el trabajo presencial después de que el pazo de San Marcos quedase cerrado al público tras dar positivo en covid-19 los diputados provinciales Pilar García Porto y Pablo Rivera. Los trabajadores volverán a sus puestos en turnos programados, para que en las instalaciones de la institución solo se encuentre el 50% del personal.
La propia diputada de régimen interior, promoción del territorio y turismo, Pilar García Porto, confirmó el plan de incorporación de los funcionarios al trabajo presencial, que será "de forma progresiva e gradual".
Los trabajadores de la Diputación trabajaron telemáticamente durante las últimas semanas, tras los positivos por coronavirus detectados. García Porto explicó que ahora se han establecido turnos de trabajo presencial "con la finalidad de preservar la seguridad y la salud de los empleados y de la propia ciudadanía a la que se le prestan servicios". Indicó que, a pesar de la situación sanitaria, desde la institución provincial "continuouse prestando servizo con normalidade e fluidez".
La Diputación de Lugo también abre este lunes sus dependencias, dado que el pazo de San Marcos estuvo cerrado al público desde el pasado 18 enero. La atención presencial será mediante cita previa.
