Eloy Castro consigue esquivar otra vez a la Justicia tras evadirse en Portugal

Las autoridades lusas lo detuvieron el pasado agosto, pero no lo enviaron a la cárcel, así que aprovechó para huir antes de ser extraditado a España
Eloy Castro, hace cinco años en la nave que tenía en la Estrada da Coruña, al lado del cuartel de Garabolos. AEP
photo_camera Eloy Castro, hace cinco años en la nave que tenía en la Estrada da Coruña, al lado del cuartel de Garabolos. AEP

Eloy Castro volvió a mostrar su capacidad de ir por delante de la Justicia y vuelve a estar fugado. Tras ser detenido en Portugal en agosto por agentes de la Guarda Nacional Republicana, el prófugo lucense logró evadirse antes de ser extraditado para ser juzgado en Lugo por el caso Autocentrum.

Tras detenerlo, la Justicia portuguesa decidió dejarlo en libertad vigilada y Castro aprovechó esa libertad de movimientos para volver a desaparecer.

La situación, comunicada por el juzgado de Oporto que llevaba la orden europea de búsqueda, ya ha obligado a volver a archivar provisionalmente la causa contra él, hasta que vuelva a ser localizado y en espera de que la próxima vez se materialice su traslado a España.

Acusado de múltiples estafas, Castro se había fugado a Portugal en 2020. Con el tiempo se logró dar con su rastro y se giró una orden de detención que, supuestamente, determinaba que debía integrar en prisión en el momento en el que fuera arrestado. 

Aunque su paradero se conocía hace tiempo, la detención no se materializó hasta mediados del pasado agosto. Los agentes del destacamento territorial de Matosinhos de la gendarmería lusa, que le seguían la pista, lo habían localizado en Vila do Conde, una coqueta localidad ubicada junto a la desembocadura del río Ave, en el distrito de Oporto. Pero los trámites burocráticos demoraron su arresto hasta el verano. 

Pero a la detención no le siguió ni la entrada en prisión ni la extradición a Lugo. Ahora, el juez luso ha comunicado la situación a Lugo y ha decretado que deberá ser ingresado en la prisión si vuelve a ser localizado. El juez portugués pide también que se le avise en el caso de que Castro se presente voluntariamente ante la Justicia en España, una posibilidad más que improbable, ya que acumula una decena de condenas por estafa, algunas de las cuales todavía tiene pendientes de cumplir, y además está pendiente de volver a sentarse en el banquillo de los acusados para ser juzgado por las estafas que sufrieron sus clientes de Autocentrum, el lujoso multimarca que gestionaba en la Avenida de Madrid

Una carrera de película

Castro, de 46 años y nacido en A Pontenova pero asentado en Lugo durante largos años, acumula una extensa carrera delictiva marcada por las estafas y ha acreditado pericia para esquivar a la Justicia.

Ahora tiene razones para continuar con su peculiar gran evasión:  el ministerio fiscal le solicita por nueve años de prisión por el caso Autocentrum, ya que le acusa de engañar a clientes en la venta de al menos una treintena de vehículos que no reunían las condiciones acordadas y de falsificar documentos de las operaciones en siete ocasiones.

Nave de Eloy Castro en la N-VI en la que se cerraron las ventas ahora investigadas. J.VÁZQUEZ
Nave de Eloy Castro en la N-VI en la que se cerraron algunas de las ventas investigadas. J.VÁZQUEZ

El catálogo de operaciones por las que se le encausó va desde la manipulación del cuentakilómetros a la negativa a entregar el automóvil pagado, pasando por el fraude en los años de matriculación o los extras, las irregularidades en la documentación o la transacción de coches con averías que imposibilitaban su circulación.

En Lugo consolidó su capacidad para engañar una y otra vez a los clientes, pero sus estafas se extendieron por todo el país y llegaron también a Portugal. De hecho, una de las condenas que acumula es por una estafa cometida en ese país vecino.