El Concello y Cruz Roja acompañarán a unas 80 personas solas que lo deseen

Las dos entidades anunciaron la renovación del programa Acompañámoste, que surgió durante la pandemia, y que ahora dispondrá de una oficina y un teléfono para pedir ayuda
acompañamoste
photo_camera Luis Abelleira, Lara Méndez y Olga López presentando el programa Acompañámoste. EP

El Concello de Lugo y Cruz Roja anunciaron este martes la renovación del programa Acompañámoste, que pusieron en marcha durante la pandemia de covid para dar apoyo a personas que estaban solas.

La necesidad de este servicio sigue siendo patente en un municipio con más de 21.000 personas de más de 65 años y muchas de ellas viviendo en una situación de soledad no deseada, explicó la alcaldesa, Lara Méndez. "Non podemos pasar por alto esta situación de soidade e de illamento involuntario. Non podemos mirar para outro lado", afirmó la regidora. "Os nosos veciños deben saber que o Concello e Cruz Vermella están ao seu carón", añadió.

Méndez dio cuenta de la ampliación de esta iniciativa junto a la concejala de Benestar Social, Olga López Racamonde, y del presidente de Cruz Roja en Lugo, Luis Abelleira, quienes explicaron que el objetivo es acompañar, en la medida en que lo deseen y en que sea posible, a una 80 personas.

El relanzamiento de este programa comenzará con una campaña informativa, a través de carteles y de dípticos, y la puesta a disposición de un teléfono (66370010) y de un correo electrónico ([email protected]) para que cualquier persona en soledad o que conozca a otra en esa situación demande el servicio. Además, comenzó a funcionar ya un punto de atención en el centro de convivencia intergeracional Paco Martín, en A Piringalla. Dos profesionales de Cruz Roja (una trabajadora social y una educadora social) atienden de lunes a viernes de 11.00 a 13.00 horas.

Esta es una de las novedades que incorpora el programa en esta nueva fase, ya que es la primera vez que personal de esta entidad social desempeñará parte de su labor en oficinas municipales, explicó la concejala. Lo harán, como hasta ahora, en coordinación con el personal municipal de servicios sociales. 

La atención y la compañía que se presta a los usuarios de este servicio es muy variable. Algunas personas son acompañadas telefónica o presencialmente por voluntarios de Cruz Roja y otras son derivadas a otros servicios de la entidad o del Concello. Hay usuarios que están dentro del programa de prevención del suicidio que tiene en funcionamiento esta entidad social y otros que reciben ayuda en el hogar, explica López Racamonde como ejemplos.

La soledad no deseada puede tener un gran impacto en la calidad de vida de las personas y provocar desde problemas del estado del ánimo hasta desórdenes del sueño y carencias nutricionales, entre otros. "Con este programa contribuímos ao mantemento das persoas maiores no seu domicilio o maior tempo posible", indicó.

Abelleira, por su parte, destacó la eficacia del binomio voluntario-profesional con el que funciona este programa, ya que la labor de los primeros muchas veces va más allá del horario laboral de los trabajadores y porque además suelen ser muy efectivos para detectar personas que pueden necesitar ayuda y para convencerlas de que la acepten. Al mismo tiempo, destacó la importancia de no invadir la privacidad de las personas.