El robo de cable telefónico bloquea la actividad de empresas de Ramil

Una avería en el servicio telefónico tuvo en jaque desde el martes por la noche hasta media tarde de este jueves a empresas y vecinos de la zona de Ramil y Tirimol. El falló perjudicó especialmente a las empresas, algunas de las cuales tuvieron que reducir drásticamente su actividad al no tener conexión a internet.

Telefónica achacó este jueves la situación a un robo de cable registrado el martes. "Se robaron 500 metros de cable, lo que afectó a la línea telefónica y ADSL de cerca de 90 clientes", señaló la compañía.

Lo prolongado de la avería generó malestar en las empresas afectadas. "Estamos al pie de O Ceao y en la N-VI, pero esto parece el tercer mundo", se lamentaba este jueves Javier Cereijo, de la empresa Gaima. La compañía trabaja sobre todo con proveedores europeos y de países extracomunitarios, como China, y llevaba dos días con sus operaciones reducidas a la mínima expresión por el fallo en la red. "Hay diez personas en la oficina que prácticamente no han podido trabajar estos días y toda la relación con los comerciales que tenemos por el resto del país hay que hacerla con móviles", decía.

Jesús Dorrío, de Desguaces Ramil, relataba este jueves que "llamé ya cinco veces y me pasan con una asesora en Bilbao que primero me decía que la avería se debía a un robo de cobre y después que el fallo lo había provocado la tormenta".

El prolongado corte crispó los ánimos, además, porque las averías son continuas. "Yo tengo muchos de mis servicios en la nube, de modo que si no tengo internet no puedo hacer muchas gestiones", decía Dorrío.

FALLOS CONTINUOS. "Cada vez que sopla el viento o cae un rayo nos quedamos sin conexión a la red y sin teléfonos fijos", detallaba este jueves Cereijo, que destacaba que los empresarios se han ofrecido incluso a cofinanciar las obras necesarias para dotar a la zona de un servicio telefónico "normal" y colocar fibra óptica.

Pero ni el ofrecimiento a pagar parte de los costes ha servido para que se mejore la red, según los empresarios, que destacaban que "no se llega ni a los cinco megas en la conexión". Hay zona de África que están mejor", decía Cereijo.

Los fallos afectan a la productividad de las empresas, pero también a la seguridad. "Todos los datos de las cámaras de seguridad de las empresas se transmiten por la red y, como hay fallos constantes, las alarmas se disparan constantemente", explicaban.