El futuro de los abandonados edificios del antiguo hospital Xeral de Lugo entró este jueves en la precampaña electoral coincidiendo con la protesta convocada para la tarde por los vecinos de A Residencia para exigir que se dote de servicios a este espacio para reactivar la zona.
Por la mañana, el alcalde y candidato a la reelección, José López Orozco, se desplazó hasta el barrio para recriminarle al PP el "incumplimiento" de las promesas con A Residencia, como la instalación de un PAC o un laboratorio de referencia de salud pública. A la vez, propuso que se cree en este espacio una residencia de mayores con plazas también para asistidos.
López Orozco se mostró reticente a la propuesta del PP de construir en estos solares la futura comisaría de la Policía Nacional, una idea de la que discrepan los socialistas, que prefieren que este edificio se ubique en otra zona, para lo cual incluso aseguran que el Ayuntamiento podría ceder terrenos en diferentes puntos de la ciudad.
Respecto a esta promesa popular, el candidato de UPyD Agustín Gallego anunció este jueves que esta formación trasladará una pregunta en el Congreso al ministro de Interior para que aclare dónde está previsto ubicar la nueva comisaría y cuál es su plazo de construcción. El alcaldable pregunta también si el Gobierno central considera que "facilitar las previsiones a los candidatos de su partido para mejorar sus expectativas electorales es compatible con la regeneración democrática".
El candidato nacionalista Rubén Arroxo planteó dedicar los abandonados edificios del viejo Xeral a albergar locales de asociaciones del ámbito social. Arroxo, que visitó por la mañana la casa Clara Campoamor, explicó que los miembros de los colectivos allí ubicados se lamentaron de las condiciones en las que tienen que trabajar. "Lugo precisa espacios para que las asociaciones puedan desarrollar su actividad en lugares adecuados", dijo el nacionalista.
En la concentración vecinal participó, entre otros, el cabeza de lista de Lugonovo, Santiago Fernández Rocha.
