El Jorge I, declarado en concurso de acreedores

Abre el procedimiento tras la demanda de un grupo de empleados
El cuatro estrellas cerró en las vísperas de las pasadas Navidades
photo_camera El cuatro estrellas cerró en las vísperas de las pasadas Navidades

EL JUZGADO mercantil de Lugo declaró este lunes en concurso necesario de acreedores al hotel Jorge I. Era una decisión esperada, que el parón navideño atrasó. El cuatro estrellas que se encuentra en A Campiña lleva casi 13 meses cerrado.

Esta instancia abre el procedimiento a raíz de la demanda que presentó una decena de trabajadores, a finales de noviembre, porque el propietario del alojamiento, el empresario italiano Maurizio Borroni, les debe unos 350.000 euros en concepto de salarios.

El juzgado emplazó a este empresario a hacer frente a la deuda y como este no respondió -le envió como es costumbre la comunicación al domicilio de la sociedad, en A Campiña-, declaró el concurso.

En el edicto hecho público el lunes también se anuncia que Maurizio Borroni es apartado de la gestión de la sociedad y el nombramiento del economista Carlos Manuel Costas Manzanares como administrador concursal.

Los acreedores dispondrán de un mes, a contar a partir del último anuncio del procedimiento que salga a la luz en el Registro Público Concursal, para comunicar al nuevo administrador los créditos que les adeudan.

Este es el segundo cuatro estrellas de la capital lucense que entra en concurso necesario de acreedores por impagos a su personal, tras el Gran Hotel Lugo, que lleva en esa situación desde abril del año pasado.

Los pleitos se acumulan así encima de la mesa de Maurizio Borroni, que adquirió el cuatro estrellas de A Campiña hace tan solo dos años. Tras la presentación de esa demanda de concurso, el empresario italiano aseguraba a este diario, desde su residencia en Suiza, que iba a saldar todas sus deudas.

La presentación de esa demanda evitó que se subastase el hotel. La puja pública del inmueble, valorado en más de 2,3 millones de euros, se iba a celebrar a petición de una entidad financiera por los 984.838 euros de una hipoteca que tiene pendientes de pago.

El empresario italiano Maurizio Borroni no hizo frente a los 350.000 euros que le reclama una decena de trabajadores

CAUSAS PENDIENTES. Además de las demandas por despido, sobre Maurizio Borroni pende una denuncia por presuntas estafa y falsedad documental presentada por los anteriores propietarios del Jorge I, la familia del restaurador Alberto García, porque solo les pagó 50.000 euros de los casi 2,5 millones escriturados por la compra del cuatro estrellas.

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