El Hula coloca los primeros neuroestimuladores eficaces contra el dolor pélvico y la incontinencia

Dos pacientes con dolor pélvico crónico fueron intervenidos este jueves para recibir los primeros neuroestimuladores de la raíz sacra S3 que se implantan en el Hula. El equipo de anestesiólogos de la Unidad del Dolor, que coordina Margarita López Rouco, incorpora a partir de ahora esta técnica que se ha probado eficaz para reducir ese tipo de dolor, así como incontinencias urinarias y fecales y disfunción eréctil.

Durante la operación —que se hace de forma ambulatoria, de forma que el enfermo se puede ir a casa el mismo día— se coloca un electrodo que envía estímulos eléctricos al tercer nervio sacro y una pila subcutánea, cuya vida se prolonga durante unos diez años. Ninguno de los dos dispositivos es visible desde el exterior.

En concreto, se aplica a pacientes sometidos a otros tratamientos previos, pero que no logran mejorar. La situación de esos enfermos suele ser muy precaria porque se trata de un dolor muy intenso, que afecta de forma radical a su calidad de vida. La mayoría toman muchos medicamentos, no pueden trabajar y, tras pasar por otros tratamientos sin éxito, se ven ya desahuciados. La ideación suicida entre estos enfermos no resulta infrecuente.

La mejoría que experimentan estos pacientes tras los implantes es, según destacan los especialistas, sustancial. Por ejemplo, es una técnica recomendada para las cistitis instersticial, también llamado síndrome de vejiga dolorosa. En algunos casos, acababa siendo precisa la extirpación de la vejiga para eludir el dolor, una intervención que ahora se podría evitar implantando los neuroestimuladores.

Los anestesiólogos de la Unidad del Dolor del Hula recibieron este jueves una sesión formativa a cargo de la coordinadora de esa unidad en el hospital Puerta del Hierro de Madrid, Cristina del Olmo, especialista en esta técnica.