El gobierno local desestima el recurso de los hosteleros que se quedaron sin casetas

Miguel Fernández dice que la ley de contratos permite a un licitador optar a más de un contrato y un afectado anuncia más reclamaciones
Desmontaje de una atracción infantil en el ferial
photo_camera Desmontaje de una atracción infantil en el ferial

La junta de gobierno local acordó el jueves desestimar los recursos presentados por las dos empresas de hostelería que se quedaron sin caseta y sin caldero del pulpo -La Palloza y Aurora do Carballiño-, después de haber sido superadas sus ofertas económicas por las presentadas por Bruxa Consulting, firma propiedad del meirense Javier Irimia.

Los hosteleros alegaron tanto contra el decreto de selección por el que quedaron mejor puntuadas las ofertas de Bruxa, al ser las más ventajosas económicamente para el Concello, así como contra la acumulación de licitaciones por parte de la misma empresa, dado que la firma de Irimia optó a tres de las cuatro casetas, así como a los cuatro calderos.

Sin embargo, el portavoz del gobierno local, Miguel Fernández, sostuvo que la ley de contratos públicos permite en este caso a un mismo licitador optar a más de un contrato a la vez y explicó que los técnicos municipales estudiaron el decreto de elección de ofertas y consideraron que «non se dan as situacións para a exclusión» de Bruxa Consulting.

Por su parte, Juan Pazo Baranda, de Aurora do Carballiño, quien dijo no tener aún conocimiento del acuerdo del gobierno, anunció nuevos recursos contra la adjudicación de las casetas, dado que considera que sí se incumple la ley de contratos. Además, dijo haber encargado un informe pericial en el que se recogen las irregularidades que dice haber detectado en las casetas instaladas y que también adjuntará en las reclamaciones.

BALANCE. Al margen de la polémica desatada por la adjudicación de las casetas, el portavoz del gobierno hizo el jueves un balance «moi satisfactorio» del San Froilán y destacó la afluencia de público que dijo que constataron tanto los barraquistas como los comerciantes instalados en el recinto ferial, para añadir que se marcharon satisfechos por el volumen de ventas. «Son unhas festas que se consolidan como as grandes feiras do outono de Galicia», comentó Fernández.

Mientras, la concejala del PP Encarna Amigo se mostró menos optimista a la hora de hacer el balance festivo, aunque admitió que la participación y el ánimo de la gente, así como el buen tiempo, «déronlle á volta a un San Froilán que arrancou coa polémica das casetas». También pidió Amigo que en próximas ediciones se planifique con tiempo y se cierre antes del verano el programa, para poder promocionarlo mejor, y se quejó del alumbrado, que vio «moi pobre», y de que «cada vez van a menos e perden solemnidade actos tan tradicionais como a recepción á corporación de Ferrol».

La edil popular pidió además «máximo rigor e control económico nas contas das festas», un apartado en el que también incidió la portavoz de Ciudadanos, Olga Louzao, que instó al gobierno a presentar cuanto antes a la comisión de fiestas los números del San Froilán para «coñecer con detalle canto se gastou e en que». Louzao cree necesario que haya «máxima transparencia, posto que as festas páganse con cartos de todos os lucenses, polo que hai que ser moi escrupulosos», dijo.