Lugo anuló este año casi tantas licencias de obras como en todo 2014

Ha declarado la caducidad de cuatro por incumplir con creces el plazo de finalización. Los promotores reclaman que aumente el periodo de demora y que devuelva las tasas
Obras ralentizadas en Sanxillao
photo_camera Obras ralentizadas en Sanxillao

La hecatombe del ladrillo queda reflejada en la capital lucense no solo por las interminables listas del desempleo -se ha duplicado el número de parados en la construcción- o por la falta de actividad -en todo 2014 el Colexio de Arquitectos solo visó una licencia de vivienda colectiva nueva-, sino también por los edificios inacabados que llevan años sin que se retomen las obras.

Entre enero y abril el Concello de Lugo ha declarado la caducidad de cuatro licencias porque se incumplió con creces el plazo de finalización de la obra, que, según la Lei do Solo es de tres años. Esa cifra supone casi tantas como las de todo el año pasado, en el que fueron seis.

Una de ellas es la de la rehabilitación del inmueble de la esquina de la Rúa Nicomedes Pastor Díaz con la Ronda da Muralla, que llevaba siete años sin actividad.

Eso no signfica que esos edificios que tienen paralizada su construcción queden como están, como un esqueleto de hierro o como mucho en ladrillo. El Concello puede exigirles a sus promotores que soliciten una nueva licencia de obras para acabarla, que repongan la parcela al estado inicial o que al menos adopten medidas de seguridad, por si entrañan algún riesgo, tales como tapiarlos o instalar una malla.

Hay otro dato que refleja esas consecuencias de la crisis del ladrillo. El presidente de la Asociación de Empresarios Promotores de Edificación de Lugo, Xabier Díaz, aseguró que en la capital lucense «hay más de 50 licencias concedidas sin iniciar».

Demanda de vivienda nueva. Los promotores que no han sido engullidos por el desplome inmobiliario aseguran que no descartan retomar algunas de estas obras, sobre todo una vez que la oferta de vivienda nueva escasea y puede incluso no llegar a cubrir la demanda existente. Es el caso de un edificio de Agro do Rolo de ocho alturas, cuya construcción estuvo aparcada en los últimos años.

"Hay apetito de vivienda nueva en el mercado", afirmó el presidente de los promotores lucenses, Xabier Díaz.

Incluso se han puesto a la venta inmuebles tal y como están. Es el caso de un edificio en estructura, sito en la zona de Fingoi, que está anunciado en un portal inmobiliario por un precio de 1.690.000 euros.

Propuestas. Ante esta situación derivada de la crisis, la patronal gallega del sector (Feproga) ha solicitado a la Xunta que en la Lei do Solo, que se va a reformar, se amplíe el plazo de caducidad de las licencias de obras a cambio de que los promotores se comprometan, cuando menos, a acabar las fachadas y la cubierta de esos inmuebles paralizados. Además, demanda que los ayuntamientos devuelvan parte del impuesto de construcción. En algunos casos han recurrido a la vía judicial. En Lugo esa tasa puede rondar los 100.000 euros en una promoción de 50 viviendas.

Comentarios