El gobierno local renovó esta semana por un máximo de tres años los contratos de alquiler a dos familias gitanas que en 2010 abandonaron el poblado de O Carqueixo para ocupar pisos adquiridos por el Concello dentro de un plan de erradicación del chabolismo. Este programa lleva paralizado desde entonces y, según anuncia la concejala de bienestar social, Ana González Abelleira, no se prevé recuperar "a curto prazo".
En la actualidad son catorce las familias que ocupan las viviendas compradas entonces gracias un convenio firmado con la Xunta de Galicia, que aportó el 65% de la inversión, cifrada en 1,4 millones de euros, mientras que el Concello asumió el resto.
Pero aunque el gobierno local confirmó que continuará alquilando las viviendas a estas familias, a un precio mínimo que oscila entre los 60 y los 90 euros, descarta financiar el realojo de más personas que residen en O Carqueixo, ya que se ha optado por trabajar con las asociaciones gitanas en un plan de integración para que abandonen de forma voluntaria las infraviviendas que ocupan ahora.
La concejala Ana González Abelleira asegura que están en marcha proyectos para que estas familias se vayan integrando en viviendas de la ciudad o en las parroquias y desalojen las casas que en los años ochenta les construyó el Concello en el poblado y que ahora se encuentran en condiciones lamentables.
De las 40 viviendas levantadas entonces, tan solo quedan en pie 14, ya que las restantes fueron demolidas por el Ayuntamiento a medida que sus ocupantes iban siendo realojados en viviendas sociales de la ciudad o en los pisos que en 2010 fueron adquiridos en distintos barrios.
MENOS POBLACIÓN. Estos derribos provocaron en los últimos años una reducción en el número de residentes en O Carqueixo, donde en 2012 había censadas 190 personas y ahora solo quedan 69, según los datos facilitados por la concejala.
"A tendencia é a reducción de habitantes no poboado e por iso estamos a traballar nun plan de integración, para que as familias se decidan a trasladarse á cidade ou á zona rural", comenta Ana González Abelleira, quien matiza que entre las medidas de este programa está el apoyo escolar para los niños o la organización de actividades lúdicas en los centros sociales del Ayuntamiento.
