El nuevo comisario jefe de Lugo, Antonio Villamarín, opina que los agentes del Cuerpo Nacional de Policía que se hicieron cargo de la investigación para esclarecer el doble crimen del Cash Record, en el que fueron asesinados a tiros Esteban Carballedo y Elena López, hicieron entonces "todo lo que había que hacer", aunque 23 años después este suceso sigue todavía sin resolver.
Las familias de ambos fallecidos volvían a concentrarse en la Praza de Avilés, ante la sede de los Juzgados de Lugo, además de colocar fotografías de ambas víctimas en las puertas de la Muralla romana y de exhibir carteles con una cronología del periplo judicial por el que ha transcurrido este caso, que está a punto de prescribir formalmente.
La cajera Elena López y el reponedor Esteban Carballedo fueron aesinados a tiros en la nave de O Ceao el 30 de abril de 1994 y, salvo que se pongan en marcha nuevas diligencias, el caso prescribirá definitivamente dentro de un mes.
"Es un caso de los años 90. En aquel momento, lógicamente, entiendo que se hicieron todas las gestiones que había que hacer y todo lo actuado fue remitido a la autoridad judicial", dijo el comisario jefe.
"Si la autoridad judicial ordena hacer algo más, lógicamente, estamos a su entera disposición para hacer todas las diligencias y gestiones que considere necesarias", añadió.
Antonio Villamarín insistió en que "en aquel momento se hizo todo lo que había que hacer".