Dormir a la altura de los pájaros

Lugo acaba de estrenar su primer glamping, que ofrece a orillas del Mera, en O Veral, tres cabañas de madera elevadas entre abedules y robles. Ya tienen lleno el primer fin de semana
Pablo Yáñez y Verónica Cela, en una de las cabañas. SEBAS SENANDE
photo_camera Pablo Yáñez y Verónica Cela, en una de las cabañas. SEBAS SENANDE

No es un camping, ni tampoco un hotel. Es un glamping, un complejo turístico formado, en este caso, por tres cabañas elevadas de madera con baño y cocina propios y servicios hoteleros como el cambio de sábanas y toallas.

Pablo Yáñez y Verónica Cela fueron los promotores de este negocio, situado a orillas del Mera, en O Veral, y que lleva por nombre Cabanas das Chousas. Abrieron el miércoles y han tenido una acogida fantástica, porque tienen reservado todo para el fin de semana.

"Hace cuatro años que compramos la finca, que nos costó encontrar porque queríamos que fuese un bosque y que estuviese cerca del Camino de Santiago. Luego, estuvimos año y medio más de obras y, ahora, por fin, abrimos al público. Esperamos que vengan a visitarnos familias, parejas y, en general, todas aquellas personas a las que les guste la arquitectura en madera y la naturaleza. En resumidas cuentas, gente que busque la paz", comenta Pablo Yáñez al que su pareja, Verónica Cela, se dirige, con una sonrisa, como el CEO del proyecto pese a que ella llevará la gestión directa y el contacto directo con los clientes.

ALGO ÚNICO. Esta pareja decidió montar un glamping tras probar suerte con una casa de piedra, que tenían también en O Veral y que explotaron durante un tiempo como vivienda de uso turístico. En vista de las posibilidades que ofrecía la zona de cara al turismo, decidieron vender la casa y hacer algo más grande y, a la vez, todavía poco visto en Galicia: un glamping, "palabra que es una mezcla de glamour y camping", aclara Pablo, donde la madera de pino termotratada se convierte en la materia prima con la que se hicieron las cabañas y que impera en el recinto.

Está abierta a familias, parejas y a todo al que le guste la naturaleza y la respuesta nada más abrir fue tremenda, dicen

El complejo está en un espacio natural espectacular y hay muchas opciones para pasear y hacer rutas, explica Pablo. Ellos no hacen aún rutas guiadas, pero hay algunas, como la de As Chousas, fáciles de hacer para cualquiera.

"El glamping es algo que está muy implantado en los países nórdicos. Nosotros somos muy de campings, especialmente de los bungalós que hay en los campings y se nos ocurrió montar algo así en Lugo, coincidiendo además que Verónica, que es delineante, se quedó en el paro en la pasada crisis de la construcción", dicen. 

El complejo está formado por tres cabañas: la Cabana dos Bidueiros, la de O Río y la de Os Carballos. Dos de ellas tienen capacidad para cuatro personas y la tercera, para cinco. Están distribuidas como un loft, en un único espacio con grandes ventanales que sirve, a la vez, de dormitorio, salón y cocina. Un pequeño tabique da acceso al baño.

Todas disponen de una terraza a la altura de los árboles y cuentan con luz, agua y calefacción y electrodomésticos como microondas, televisión, nevera y vitrocerámica. El lavado de ropa es aparte. "El precio para dos personas, en temporada baja, es de 130 euros la noche, y en temporada alta, de 150. Por cada persona a mayores, cobramos 20 euros más, en temporada baja, y 30, en alta", apunta Pablo Yáñez.

El proyecto costó 250.000 euros, de los que 150.000 fueron en madera. La pareja recibió una subvención de la Consellería de Economía, Empresa e Innovación por 20.000 euros, ya que el proyecto encajaba con uno de los programas de desarrollo de la industria forestal. La pareja tiene ahora en mente la ampliación a una cabaña más en cuestión de meses.