Arte

Diego Anido

Su obra fue merecedora este año del campeonato de España a través de la Liga Nacional de Grafiti y su Julio César recibió el reconocimiento internacional
Diego Anido. AEP
photo_camera Diego Anido. AEP

Se llama Diego Anido Seijas pero todo el mundo lo conoce ya como DiegoAS, con las iniciales de sus dos apellidos, apodo con el que firma sus obras. Este grafitero lucense consiguió, en este año, tanto el reconocimiento nacional, con un merecidísimo campeonato de España ganado, como a nivel internacional, cuando su mural de Julio César, en la medianera del aparcamiento de Obras Públicas, fue votado en un perfil especializado en grafitis en Instagram, el pasado mes de agosto, como el mejor del mundo.

Aunque tan solo tiene 32 años, DiegoAS lleva ya la mitad de su vida dedicado al grafiti. Comenzó a los 15, pintando con spray. En Lugo, donde nació, hizo varias obras pero también dejó muestras de su talento en las calles de Oviedo, Málaga, Madrid, Barcelona, Oporto, Granada y, recientemente, en El Corte Inglés de A Coruña.

Con algo de formación en las artes gráficas, como serigrafía y grabado artístico superior, DiegoAS tiene tras de sí una larga experiencia en el mundo de la impresión digital con rotulación y otros formatos.

Desde 2015, se dedica a hacer murales, aunque también realizó otras obras con diferentes técnicas y formatos como cuadros u otros soportes en el estudio.

Actualmente cuenta con una notable carga de trabajo de cara a los próximos meses, pero siempre saca tiempo para comprometerse con proyectos sociales que ayudan a los más jóvenes a buscar un futuro a través del arte, algo que hizo este año a través del programa Lugo Cores, organizado por el Concello de Lugo.

Su reconocimiento nacional e internacional le permite ahora el lujo de poder seleccionar las propuestas laborales que le llegan. Mientras tanto, su retrato de Julio César, junto a la muralla y con grandes dosis de realismo, se ha convertido en un novedoso reclamo turístico de la capital lucense.

Ahora espera poder hacer otro mural impactante en Lugo y le gustaría un sitio en particular para plasmar su creatividad, según declaró en una entrevista realizada meses atrás en este periódico: serían las columnas que sostienen el puente nuevo.
 

Un mural de 100 horas de trabajo
Este Julio César es una reproducción de una estatua del Louvre, en París. Pensó en pintar a Fabio Máximo, el fundador de Lucus Augusti, pero finalmente se decantó por Julio César y acertó. Trabajó 100 horas, a lo largo de diez días. El resultado está a la vista y resulta espectacular.