La Guardia Civil de Lugo ha detenido, en colaboración con agentes de la policía judicial de Valencia, a dos ciudadanos de Quart de Poblet (Valencia) por un supuesto delito de estafa a través de una red social. Su captura ha tenido lugar en el marco de la operación Fonteo, que comenzó el pasado noviembre a raíz de una denuncia por la concesión de un falso crédito de 8.000 euros en Lugo y todavía continúa abierta.
Los detenidos, de 33 y 34 años de edad, según un comunicado de la Guardia Civil de Lugo, utilizaban técnicas de ingeniería social a través de internet para acceder a las víctimas.
Para realizar la estafa, siempre conforme al relato del Instituto Armado, una usuaria transmitía a las víctimas, que normalmente se encontraban en una situación económica complicada, el testimonio de que había accedido a un préstamo sin ninguna dificultad y le facilitaba los datos de una supuesta trabajadora de la entidad bancaria.
Tras intercambiar los documentos necesarios para la solicitud del crédito, normalmente por importes comprendidos entre 80.000 y 100.000 euros, los supuestos autores de la estafa le exigían a las víctimas diversas cantidades de dinero en concepto de "gastos de notaría, contrato de seguros, depósito de garantía", que debían depositar en una cuenta de una supuesta entidad bancaria francesa, cuyo nombre era similar al de una real. Asimismo, las víctimas recibían llamadas desde el extranjero en las que su interlocutor se hacía pasar por personal de la entidad bancaria.
Al respecto, la Guardia Civil ha explicado que estos delitos suelen ser realizados por organizaciones internacionales de criminales que buscan personas que participen como colaboradores.
De momento, el Instituto Armado ha identificado al menos a diez perjudicados. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones en fechas próximas.
ROBO EN SAN COSME DE BARREIROS. Por otra parte, la Guardia Civil de Lugo detuvo el jueves en San Cosme de Barreiros a dos rumanos de 36 y 37 años vecinos de Lugo como supuestos autores de un robo con fuerza. Se les relaciona con la sustracción, el pasado mes de diciembre, de cuatro baterías valoradas en 750 euros y de daños valorados en 850.
