Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Lugo detuvieron a dos menores de 17 años de edad e identificaron a un tercero, que tiene solo 13 años -y por lo tanto no puede ser imputado-, como supuestos autores del robo de su bolso a una mujer de 64 años por el método del tirón y de agredir a su marido cuando el hombre salió en su defensa.
Los hechos tuvieron lugar sobre la medianoche del domingo, cuando la sala de emergencias de la Policía Nacional recibió una llamada en la que un particular alertaba de que una mujer estaba siendo víctima de un robo en la calle Ramón Montenegro.
Una mujer de 64 años y su marido, que estaban haciendo turismo por Lugo, fueron abordados por tres chavales cuando se dirigían a su hotel, que los rodearon y le tiraron con fuerza del bolso a la mujer, de modo que se lo arrancaron del hombro.
El marido se enfrentó a los delincuentes, que acabaron huyendo a la carrera, pero estos respondieron de forma violenta y lo agredieron.
Con los datos aportados por las víctimas y la colaboración vecinal, los agentes de policía localizaron en una plazoleta cercana al lugar de los hechos a uno de los menores, que llevaba ocultas entre su ropa varias pertenencias de la víctima.
Los otros dos jóvenes también fueron sorprendidos cuando merodeaban por los aledaños. Ya en Comisaría, los dos menores presentaron en todo momento "una actitud chulesca y amenazante", con comentarios hacia los agentes como "son unos hijos de puta, a ver si os morís", secundados por la madre de uno de ellos, que se encaró con los policías y les dijo "hijos de puta, ojalá explotaran como bombas, asesinos".
Uno de los menores llegó incluso a intentar huir de la comisaría, pero fue alcanzado a la carrera por los policías.
Los agentes propusieron a la madre para una sanción por falta de respeto a agentes de la autoridad. En cuanto a los detenidos, los hechos fueron puestos en conocimiento de la Fiscalía de Menores y todos quedaron en libertad, pero tras ser advertidos sus familiares de que deben presentarse ante la autoridad judicial cuando sean requeridos.
Uno de los chicos de 17 años fue entregado a la custodia de su madre y el otro, un interno que se encontraba huido del Centro de Menores Santo Anxo, de Rábade, fue reintegrado a esa institución, mientras que el 13 años quedó al cuidado de su abuela.
